Los cuatro astronautas del Atlantis y los seis residentes de la Estación Espacial Internacional (EEI) a la que está adosado el transbordador, disfrutaron de una cena estadunidense de pollo, carne con frijoles y pastel de manzana.
El comandante del Atlantis, Chris Ferguson, dijo en una serie de entrevistas de tv que el día de descanso les ha dado la oportunidad de “apreciar” su trabajo en el espacio y que la descarga de más de la mitad de los suministros que llevan a la estación se ha completado.
El Atlantis partió de Florida el pasado viernes en su último viaje con una carga mil 265 kilos de repuestos, equipo y 1.2 toneladas de alimentos que permitirán a la base contar con suministros durante un año.
La Agencia estadunidense para la Aeronáutica y el Espacio (NASA) quiere que la estación en órbita esté bien provista en caso de que las empresas privadas que en la actualidad construyen una nueva nave, se demoren en sus esfuerzos por reabastecer la estación.
La compañía californiana “SpaceX” informó esta semana que espera realizar en los próximos seis meses la primera prueba de acoplamiento en la estación de su nueva cápsula “Dragón”.
En sus entrevistas Ferguson elogió al Atlantis y calificó su desempeño como óptimo a pesar de su antigüedad. El Atlantis partió al espacio por primera vez en 1985.
Este es su vuelo número 33 y la misión número 135 de un transbordador. La nave será retirada a un museo junto al Discovery y el Endeavour a su regreso a la Tierra la semana el próxima.
El Atlantis retornará con más de 3,181 kilos de basura y equipo defectuoso de la estación orbital, el cual será revisado por ingenieros para detectar las fallas y buscar su mejora.