La ley, que entrará en vigor este miércoles, fue ratificada por el comité permanente de la Asamblea Nacional Popular (ANP), según medios locales de Hong Kong. Recoge penas de hasta cadena perpetua para "actos de secesión, subversión, terrorismo y confabulación con fuerzas extranjeras para poner en peligro la seguridad nacional".
En su rueda de prensa diaria, el ministro portavoz del Gabinete de Japón, Yoshihide Suga, dijo que, en caso de que se confirme la ratificación, es "lamentable" por el hecho de que se haya aprobado a pesar de la "fuerte preocupación" entre la comunidad internacional y los ciudadanos de Hong Kong.
"Para Japón es importante tener unos intercambios económicos y personales con Hong Kong bajo el esquema de un país y dos sistemas", agregó Suga refiriéndose a los principios que rigen para la excolonia británica.
Hong Kong, añadió, "debería mantener un sistema libre y abierto bajo el criterio de un país y dos sistemas, y desarrollarse democráticamente y con estabilidad".
Suga dijo que el Gobierno de Shinzo Abe estaba revisando este tema "con gran atención y preocupación" y había expresado su criterio a China "a través de distintas vías".