"Ha sido una decisión muy dura para nosotros", dijo en un comunicado de prensa el director artístico del Carnegie, Clive Gillison.
"Sin embargo, la seguridad de nuestros artistas, nuestro público y nuestro personal es primordial", agregó.
Mientras, el Lincoln Center, que presenta espectáculos y además es la sede de la Met Opera, la Filarmónica y otras organizaciones, también anunció este jueves el cierre hasta febrero de 2021, y anticipa unas pérdidas de 1.3 millones de dólares en venta de entradas, según dijo al New York Times una portavoz de la institución, Isabel Sinistrore.
Agregó que el Lincoln Center, que ha tenido que deshacerse de la mayoría de sus empleados, registra desde que empezó la pandemia una pérdida de ingresos total de 13 millones de dólares, incluyendo ventas de entradas y alquiler de sus espacios.
Synneve Carlino, una portavoz para el Carnegie Hall, afirmó por su parte que espera un déficit de 8 millones de dólares para el año fiscal que termina el 30 de junio, y anticipa un déficit aun mayor el año que viene, a pesar de que también ha despedido a unos 130 de sus 354 empleados.
El Carnegie Hall espera poder reabrir sus tres teatros el 7 de enero de 2021, y el Lincoln Center espera hacer lo propio el 6 de febrero.
Este mismo jueves, el Ballet de Nueva York también anunció la cancelación de todos sus espectáculos hasta, al menos, enero de 2021, lo que conlleva que estas Navidades no interpretará "El Cascanueces de George Balanchine", una de sus principales fuentes de financiación y que ha producido de manera interrumpida durante más de 60 años.