La entidad añadió que la final de la Libertadores será el 21 de noviembre y la de la Copa Sudamericana el 7 de noviembre del próximo año.
La decisión del Consejo de la Conmebol dejó fuera a otras seis candidatas que aspiraban a ser sede de los dos máximos acontecimientos futbolísticos del continente.
Brasil presentaba para la Libertadores, además de Maracaná, el estadio Mineirão, en Belo Horizonte; Arena do Gremio, en Porto Alegre; Estadio Beira-Rio, también en Porto Alegre, y Estadio do Morumbi y Arena Corinthians, ambos en Sao Paulo.
Argentina competía a la Libertadores con el Estadio Mario Kempes, y Perú con el Estadio Nacional de Lima.
En el caso de la Copa Sudamericana, las ciudades que pasaron a la última fase fueron la premiada Córdoba y La Plata, con el estadio Único, y Brasilia, con el Estadio Mané Garrincha, en Brasil.
Para la selección de las sedes un equipo de asesores técnicos visitó de forma oficial los estadios y evaluaron las características técnicas y campos de entrenamiento y los requisitos de seguridad.
También se tuvo en cuenta la movilidad y el alojamiento que ofrece la ciudad, así como los aspectos sociales, políticos, medioambientales y comerciales del lugar.
El próximo año será el segundo que la Conmebol elige dos ciudades para las finales únicas de cada una de sus Copas.
La final única de la Copa Libertadores 2019 se disputará en el estadio Nacional de Santiago de Chile el próximo 23 de noviembre.
La sede elegida para la final única de la Copa Sudamericana de este año fue Lima, pero la Conmebol después la cambió por Asunción (Paraguay), donde se medirán el próximo 9 de noviembre el Independiente del Valle ecuatoriano y el Colón argentino.
Será en el estadio General Pablo Rojas, conocido también como 'La Nueva Olla', del club Cerro Porteño.