Esta iniciativa busca "fortalecer la capacidad de resiliencia de las islas a través de prácticas de adaptación y mitigación al cambio climático", precisó el Ministerio en un comunicado difundido este jueves.
Agregó que la elaboración del programa "Galápagos combatible con el clima" ha contado con el apoyo del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO).
También se han involucrado varias entidades del Ejecutivo ecuatoriano y los gobiernos locales de las tres islas habitadas del archipiélago (San Cristóbal, Santa Cruz e Isabela), así como del Parque Nacional Galápagos, entidad encargada de vigilar y proteger la frágil biodiversidad de esa reserva natural.
Karina Salinas, subsecretaria en funciones de Cambio Climático del Ministerio del Ambiente, aseguró que la iniciativa contó con la colaboración de la comunidad galapagueña.
"Nos acercamos a la comunidad para conocer sus necesidades e iniciativas, el programa dará la pauta para seguir trabajando y ser un ejemplo como país ante el Fondo Verde para el Clima", remarcó Salinas.
La iniciativa ecuatoriana busca "la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero a través de la diversificación de la matriz energética de las islas", así como desarrollar prácticas agropecuarias inteligentes para mitigar los efectos de la crisis climática.
También prevé mejorar la capacidad de respuesta de las instituciones de las islas para gestionar información, incorporar la variable climática en los procesos de monitoreo e incidir en la toma de decisiones basadas en evidencia de variables ambientales, con el fin de "fortalecer la resiliencia de las comunidades humanas y de los ecosistemas" del archipiélago.
El GFC es un fondo creado en el del marco de la Convención de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, para ayudar a países en desarrollo en prácticas de adaptación al cambio climático y mitigación de sus efectos.
El archipiélago de Galápagos, situado a unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales de Ecuador, está formado por trece islas grandes, seis menores y 42 islotes, y por su rica biodiversidad es considerado un laboratorio natural que permitió al científico inglés Charles Darwin desarrollar su teoría sobre la evolución y selección natural de las especies.