Según la página web de la entidad bancaria (www.pbc.gov.cn), esta subida se aplicará a partir de mañana, miércoles, y también afectará al interés de los depósitos, que subirán otro cuarto de punto, hasta el 3.25 por ciento.
Se trata de la cuarta subida de tipos que China aplica desde el pasado mes de octubre -la segunda en lo que va de año-, cuando empezó a imponer una nueva política destinada a controlar la inflación, que alcanzó su máximo en 28 meses en noviembre, con un 5.1 por ciento.
El principal órgano de planificación económica de China, la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo, prevé que esta tendencia continúe en el primer semestre de 2011, con una subida del 4.9 por ciento, nueve décimas por encima del objetivo marcado para todo este año por el Ejecutivo chino.
Ese mismo porcentaje, un 4.9 por ciento, fue el que registró el Índice de Precios al Consumo (IPC) en febrero, impulsado por un encarecimiento del 11 por ciento en los alimentos y pocos días antes de que el primer ministro Wen Jiabao expresara que la mayor preocupación del régimen es controlar la subida de precios y, con ello, la estabilidad social.
La economía china, que salió indemne de la crisis de 2008 gracias a que Pekín mantiene prácticamente cerrado a la inversión extranjera su sector bancario, creció un 10.3 por ciento en 2010.
Sin embargo, Wen Jiabao fijó el crecimiento para los próximos años en un 7 por ciento con el fin de enfriar la economía y la inflación y, con ello, mantener la estabilidad social.