En un comunicado emitido junto con la representación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Yemen, la dependencia precisó que desde el pasado mes de abril se han confirmados un total 612 mil 703 personas afectada con la bacteria Vibrio Cholera, de las cuales dos mil 048 han muerto.
Pese a que el crecimiento de la epidemia ha disminuido en los últimos dos meses, la declaración destacó que unos tres mil nuevos casos diarios se han divulgado en los últimos días, según reporte del sitio Arab News.
La epidemia de cólera de Yemen, es actualmente la más grande en el mundo, se ha extendido rápidamente debido al deterioro de las condiciones de higiene y saneamiento y las interrupciones en el suministro de agua en todo el país, debido al conflicto armado, que mantiene a millones de personas sin agua potable.
La República de Yemen ha permanecido sumida en el caos desde septiembre de 2014, cuando las tropas del movimiento rebelde Houthi tomaron el control de la sede del gobierno, el aeropuerto, escuelas y varios edificios públicos de Saná, obligando al presidente Rabbu Mansur Hadi a huir a la sureña ciudad de Aden.
Las cifras del ministerio yemenita de Salud y la OMS local superan por muchos las estimaciones hecha a finales de junio pasado, cuando se alcanzaron los 218 mil casos y se previó que esa marca se duplicaría, aunque a finales de julio la propagación llegó a 400 mil infectados.
Las epidemias normalmente disminuyen tan pronto como surgen, así que el pico de la enfermedad, que debe ser aproximadamente la mitad del volumen total eventual, sin embargo dadas las condiciones existentes en Yemen la epidemia no ha parado.
El portavoz de la OMS en Yemen, Tarik Jasarevic, expresó su confianza en que cese pronto el número de contagios, ante la disminución que se registra en algunas de las zonas más afectadas, como Saná y las gobernaciones de Hajjah y Amran.
Sin embrago, en otras zonas de las gobernaciones de Hodeidah, Al Jawf, Al Mahwit, Ibb, Dhamar, Al Bayda y Aden, se ha regiatrado un "súbito y significativo aumento" en el número de casos sospechosos.
"La OMS está investigando la razón de este aumento. Un objetivo clave de la investigación será determinar si los números son exactos y si el aumento de casos sospechosos es, en realidad, causados por cólera u otra enfermedad diarreica como rotavirus", indicó Jasarevic.