El fenómeno tocó tierra la noche del lunes en Matamoros, Tamaulipas, con vientos de 100 kilómetros por hora y cruzó rápido en su camino hacia el sur de Texas, en una ruta similar a la que siguió el huracán Alex en junio pasado.
Por la mañana Hermine disminuyó sus vientos a 75 kilómetros por hora. Su centro se ubica a 60 kilómetros al suroeste de Mathis, Texas, y se desplaza rápidamente en dirección norte-noroeste a una velocidad de 28 kilómetros por hora.
Según los pronósticos del CNH, la tormenta se degradará a depresión tropical durante este martes.
Las alertas de huracán para zonas costeras de México y Texas fueron canceladas, pero permanece en vigor un aviso de tormenta tropical de la desembocaudra del Río Bravo hacia el norte hasta Port O’connor, Texas.