En una entrevista con la agencia del Conacyt, el director de desarrollo tecnológico e innovación de la empresa Sustentabilidad en Energía y Medio Ambiente SA de CV y encargado del proyecto, Carlos Miguel Apipilhuasco González, dijo que la planta busca ofrecer una alternativa de sustentabilidad en la ciudad de México.
“Nuestras tres principales líneas de acción son el desarrollo de sistemas integrales para el aprovechamiento y valorización de residuos urbanos, sistemas para tratamiento y gestión de agua, todo orientado hacia la sustentabilidad”, mencionó el directivo.
Apipilhuasco González, socio fundador de la compañía, comentó que la idea surgió porque en México se generan alrededor de 120 mil toneladas diario de residuos sólidos, y solo se procesa 10 por ciento por medio de la separación de residuos orgánicos e inorgánicos.
“Inició como un proyecto universitario en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), orientado a la creación de una empresa; la infraestructura fue con nuestros recursos, después aplicamos al Cleantech Challenge MX, un concurso de innovación sustentable, a partir de ahí obtuvimos el apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt)”, resaltó el encargado del proyecto.
Añadió que la delegación Milpa Alta, en la ciudad de México, tiene una eficiencia de 81 por ciento en la separación de residuos, además, contribuye en la inclusión de la tecnología en un sección pública, por ello, dijo, se decidió llevar el proyecto a dicha demarcación.
“La ciudad de México no cuenta con la infraestructura necesaria para hacer frente a todos los residuos sólidos que genera, por ello nos acercamos a la delegación Milpa Alta con el apoyo de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación (Seciti) del Distrito Federal”, comentó.
El directivo puntualizó que la fábrica que instalaron en la delegación Milpa Alta busca aprovechar los residuos sólidos con la generación de energía suficiente y así lograr el autoabastecimiento del centro de acopio.
“El proyecto consiste en el arranque y monitoreo de esta planta para la valorización energética de los residuos generados de la tela del nopal, 95 por ciento es residuo de tela de nopal, y el resto de algunas otras verduras que se comercializan en el mercado”, detalló.
Dijo que el procedimiento se fundamenta en el aprovechamiento de los residuos orgánicos (RO) a través de un proceso biológico de digestión anaerobia, el cual produce la generación de biogás.
“Uno de los pilares de este proyecto no solo es la implementación de un sistema en un mercado, también es la integración de un sistema tecnológico para la sensibilización social y así acercarse a la tecnología y visibilizar su importancia para el beneficio de una comunidad”, apuntó Apipilhuasco González.
La planta tiene 85 por ciento de avance y los directivos de la empresa prevén que en un corto tiempo inicie operaciones para dar paso a la producción de energía limpia.
“Estamos por comenzar el equipamiento de la planta, está proyectado para que en diciembre ya esté la obra totalmente finalizada. Hasta el próximo año ya estará operando para generar energía suficiente para poder iluminar el CANV”, aseguró.