En conferencia de prensa el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba hizo un resumen del encuentro. "La reunión tuvo lugar en un clima respetuoso y constructivo", dijo.
Bruno Rodríguez Parrilla aseguró que ambos mandatarios acordaron la necesidad de desarrollar una agenda que negociarán en los próximos meses y destacó las condiciones de las que dependerá el ritmo del proceso de normalización.
"No habrá normalización con bloqueo y no habrá progreso sustancial en el proceso de normalización sin cambios sustanciales en la aplicación del bloqueo", señaló.
Otra condición prioritaria destacada por el ministro es la devolución del territorio ocupado por la base naval estadounidense de Guantánamo.
Mientras tanto, la delegación cubana seguirá presionando por el levantamiento del embargo mediante la presentación de una resolución ante la Asamblea General el 27 de octubre.
Pero a diferencia de otros años, en esta ocasión se especula sobre la posibilidad de que por primera vez EE.UU. pudiera abstenerse de la votación. Ante preguntas de los periodistas sobre cómo reaccionaría Cuba a esa votación, Rodríguez Parrilla prefirió mantener una postura de cautela.
"No imagino cómo se conducirá la delegación de Estados Unidos. Será obviamente una votación registrada. Ustedes conocen que el año pasado recibió el apoyo de 188 Estados miembros. Es un reclamo internacional de nuestra región que provoca aislamiento y descrédito a la política exterior de Estados Unidos", sostuvo el ministro.
A pesar de sus diferencias, Rodríguez Padilla aseguró que encontraron puntos en común de cara a la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y la promoción de la salud pública, entre otros temas.