Esta Feria, subrayó el funcionario, es un acto hecho entre todos, es la suma de todas las voluntades, un espacio donde se da la diversidad, el encuentro, y la ciudad acoge a instituciones federales e internacionales y a la diversidad de ideas que caracterizan al libro y la lectura.
“El único privilegio en esta Feria es atenuar la simetría que existe en esta industria, impulsar lo que emerge y que está abajo, no en detrimento de lo que tiene éxito y prospera”, planteó el Secretario.
Asimismo, destacó la colaboración interinstitucional, indispensable para que proyectos de esta naturaleza se fortalezcan y agradeció la participación del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes; la Embajada de Brasil en México; la Secretaría de Relaciones Exteriores; la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, y la Asociación de Editores Mexicanos Independientes.
Del gobierno de la ciudad de México, agradeció su colaboración a la Secretaría de Educación, al Sistema de Transporte Colectivo Metro, al Fondo Mixto de Promoción Turística, y en especial a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, que aportó recursos y voluntades para que esta Feria sea un éxito y tenga como invitado especial a las letras brasileñas.
“Es un honor tener de invitados a esta cultura a la que nos sentimos tan unidos y a veces sabemos tan poco. Será una gran posibilidad acercarnos a la cultura brasileña, pero además mostrar un universo muy complejo de su literatura que nos lleva a la relación entre cultura y comunidad, a literatura como un factor de visibilización de otras voces a veces están excluidas de la literatura”, señaló el funcionario, y aseveró que los escritores procedentes de Brasil a tierra nacional, ampliarán nuestro universo no sólo literario, con la relación entre la palabra, música y el baile.
Una de las ventajas de la lectura, dijo, es que es una forma verificable de dialogar con los muertos, y en este sentido enfatizó que la Feria Internacional del Libro en el Zócalo será también un espacio de encuentro con autores, algunos de ellos que nos han dejado hace tiempo; otros, en cambio, cumplen en 2014 su centenario, como Octavio Paz, Efraín Huerta, José Revueltas, por mencionar algunos, excepto del poeta Nicanor Parra, del cual se celebrará su centenario en vida.
Más actividades y solidaridad
Para esta edición la Feria Internacional del Libro, contará con una inversión de 18 millones 436 mil pesos, distribuidos de la siguiente manera.
En esta edición —reveló Vázquez Martín— la Feria Internacional del Libro tendrá mejores condiciones para la difusión del libro, ya que este año se redujo su gasto en infraestructura en comparación de 2013, de más de 11 millones invertidos a 8 millones, dando cabida a que el mayor gasto en inversión se diera en las actividades programadas, generando un aumento de 300 actividades en comparación con el año pasado —que se dio en una feria atípica en una crisis de diversos tipos, aclaró— a 750.
Además, este año se suma el apoyo del Fondo Mixto de Promoción Turística, y la Feria cuenta con presupuesto adicional por parte de la Asamblea Legislativa, relacionado con el estímulo a la relación cultural entre México y Brasil.
Por otro lado, la Feria del Libro, como una forma de solidarizarse y “abrazar le dolor de los normalistas de Ayotzinapa (estado de Guerrero), vamos a invitar a todos los que asistan a la Feria, libreros y público, a hacer una donación para la biblioteca de la Normal de Ayotzinapa. Es la manera en que queremos participar, mandar nuestro abrazo y contribuir a que la educación en la Normal se imponga sobre el dolor, y también hacer votos porque la justicia se imponga en este caso”, anunció y convocó Vázquez Martín.
Centros de lectura y libros virtuales
Ricardo Cayuela, director de Publicaciones de Conaculta, señaló que la Secretaría de Cultura era el único espacio del país donde no se había firmado un convenio, hasta la llegada de Eduardo Vázquez a la institución capitalina, cuando se encontraron un gran interlocutor para trabajar de manera coordinada.
Informó que por primera vez instalará el Centro de Lectura, espacio que además de ser enriquecido con una programación variada con lecturas, talleres, cursos de acercamiento a la cultura digital, tendrán como invitados a los Estados de Tlaxcala y Tamaulipas, el primero participará con narradores orales, y el segundo con dos obras de teatro de títeres.
A través de este Centro, dijo, se da continuidad al Convenio de Colaboración para el Desarrollo Cultural suscrito recientemente por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el gobierno del Distrito Federal.
Carlos Anaya Rosique, secretario de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM), resaltó que la Feria del Libro del Zócalo es una oportunidad única para los editores de poner el libro al alcance de cerca de los 800 mil lectores que se acercan a esta convocatoria.
Y es que mencionó que el mercado de libros tiene en las ferias un mercado innegable, pero también es cierto que éste crece lamentablemente ante el cierre de librerías, además de las novedades, las editoriales exhiben libros que no tienen posibilidades en los “cada vez menos locales tradicionales”, por lo que es indispensable que las políticas públicas destinadas a la difusión de la cultura y lectura, tengan en cuenta a los canales tradicionales de distribución del libro, fortalecer a las librerías también es una forma de apoyar al libro.
En su intervención, la Secretaria de Educación de la ciudad de México, Mara Robles, dio a conocer que la colaboración de la dependencia a su cargo en la Feria, consistirá en la colocación de un stand, que será una zona de lectura donde el público podrá participar, leer, sentirse cómodo y ser un espacio adecuado para desarrollar dinámicas lectoras, lúdicas, propositivas y educativas.
Robles detalló que en dicho stand será una especie de biblioteca abierta, donde todos pueden entrar, tomar los libros, leerlos por el tiempo que quieran, tocarlos, a propósito de que también serán exhibidos materiales escritos y producidos por la propia Secretaría de Educación y libros digitales, a los que podrán acceder gracias al internet gratuito del Zócalo capitalino.
Enrigue, Tepito, Iztapalapa y Cuautepec
En el contexto de la Feria del Libro se otorga el Premio Iberoamericano de Novela Elena Poniatowska, (dotado con 500,000.00 pesos mexicanos) mismo que este año, anunció Vázquez Martín, el fallo fue en favor del escritor Álvaro Enrigue por su novela Muerte Súbita.
Respecto del Premio al Mérito Literario Carlos Monsiváis, el titular de Cultura dio a conocer que como característica particular, a partir de esta edición de la Feria, el premio tendrá como sujetos a los promotores culturales y no a artistas y escritores como se hacía tradicionalmente.
Será —dijo— para aquellos que desde la comunidad y desde sus propias circunstancias hacen que la vida cultural se desarrolle.
De esta manera, el premio se divide en dos reconocimientos: uno a la trayectoria individual de promotores culturales comunitarios y otro, en reconocimiento a la trayectoria de un colectivo cultural comunitario.
De la trayectoria individual el fallo fue para Luis Arévalo Venegas, del barrio de Tepito, que cuenta con más de 30 años de trabajo como promotor cultural, y para Delia Hernández Pastor, de la colonia Reforma Política, en Iztapalapa, quien ha trabajado por mejorar las condiciones de vida de la colonia donde vive, siendo así fundadora de lo que hoy se conoce como Casa de Cultura Imaginarte.
El reconocimiento para la trayectoria de un colectivo fue para Jóvenes Orquestas. Orquestando la Lucha, del barrio de Cuautepec (Delegación Gustavo A. Madero), modelo de educación artística no formal, para incidir en su territorio mediante la impartición de talleres de música, son jarocho, danza regional y laudería. Se conformó desde 2006 y ahora cuenta con más de 300 niños y jóvenes en sus talleres.
Asimismo, en este mismo marco, se entregará el Premio de Poesía Joven Alejandro Aura, a Mayco Osiris Ruiz, por su poemario El revés de esta luz, siendo ésta su primera publicación.
Brasil en el Zócalo
En su intervención, Gustavo de Britto Freire Pacheco, primer secretario de la Embajada de Brasil en México (Jefe de la Sección Cultural y Educacional), estableció que tanto Brasil como México no son únicamente las dos más grandes economías de América Latina y la población más grande, también son los dos países de más grande densidad cultural en la región y hay muchas cosas que nos hermanan. Sin embargo, el desconocimiento mutuo entre los pueblos es inmenso.
En este sentido, indicó que la literatura es uno de los elementos más eficaces de acortar distancias y promover el conocimiento mutuo, por lo que los invitados a la Feria del Zócalo son un seguimiento muy representativo de la literatura brasileña con poetas de mucho reconocimiento, como Angélica Freitas y Ricardo Domeneck.
Asimismo, destacó la presencia de representantes de la literatura marginal, con gente que salió de la periferia de las grandes ciudades, en particular de las Favelas de São Paulo, intentaron no sólo bajar los libros a la calle, también subir la calle hacia los libros y que el fenómeno literario vaya más allá de las librerías.
Agregó que esto será acompañado por la publicación de una antología bilingüe, Brasil Periférica. Literatura marginal de São Paulo, publicado por la propia Secretaría de Cultura. De igual manera, señaló está previsto la realización de un espectáculo que amenizará la venta nocturna del viernes 18 de octubre, con ritmos brasileños ejecutados por Pedro Miranda y sus músicos.
La Feria viaja en Metro
Dentro de la rueda de prensa, José Alfonso Suárez del Real, subsecretario General de Administración y Finanzas del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, afirmó que la gran fiesta de los libros no puede pasar desapercibida para el Metro, reveló que del 13 al 17 de octubre, en las 45 Estacionartes del STC habrá lecturas en voz alta.
Asimismo, el sábado 11 de octubre, a las 16:00 horas, en la estación Zócalo-Pino Suárez, estarán el guerrero de las letras Binho y el activista de la métrica Alan da Rosa, quienes deleitarán con su material y podrán entrar en contacto con los metronautos que acudirán a encontrarse con la literatura brasileña.
Mientras que el sábado 18, en ese mismo espacio y a la misma hora, tendremos la oportunidad de encontrarnos con las palabras del español Tomás Arias Soler, de la cubana Odalys Leyva, de la peruana Teresa Álvarez Orbegoso, del costarricense Álvaro Mata Guillé, de la chilena-ecuatoriana Daisy Novoa Vásquez, del irlandés Dylan Brennan y del mexicano Manuel Cuautle, quien moderará el encuentro de dichos autores en ese espacio del STC Metro.
Utopía, Historia y Ucronía
En su intervención, Paloma Sáiz Tejero, coordinadora de la Brigada para Leer en Libertad, A.C., misma que coordinará las actividades de la carpa de editoriales independientes, Foro Para Leer en Libertad, que funcionará por medio de tres conceptos —Utopía, Historia y Ucronía— que convocarán a un centenar de escritores, periodistas, creadores gráficos, sociólogos, politólogos, poetas de México y otras partes del mundo.
Entre ellos: Armando Bartra y Enrique Dussel, con Noam Chomski desde Nueva York, el italiano Valerio Máximo Manfredi y el español Alfonso Mateo Sagasta, los novelistas policiacos Juan Sasturain de Argentina y Petros Markaris de Grecia junto a los mexicanos Haghenbeck y Monteverde conversarán de la anti-utopía de la novela negra.
Cuauhtémoc Cárdenas impartirá una conferencia de sobre Lázaro Cárdenas y la expropiación petrolera; Sanjuana Martínez hablará sobre Las amantes del poder y José Reveles sobre El Chapo y una grupo de importantes abogados conversarán sobre el horror de ejercer el derecho en México.
También asistirán destacados escritores como Rius, El Fisgón, Hernández, Helguera, Gis y Trino, escritores y narradores que pondrán sobre la mesa las formas, el presente, futuro y alcances de esta forma de la literatura. Además de que todos los días la carpa contará con músicos mexicanos como Alonso Arreola o Gabino Palomares.
La XIV Feria Internacional del Libro en el Zócalo se realizará del 10 al 19 de octubre en la Plancha de la Constitución.