Como es costumbre, la movilización del 2 de octubre partió de la Plaza de las Tres Culturas, donde en 1968 murieron en una represión estudiantil decenas de personas, y se dirigió al Zócalo, ubicado en el centro de la ciudad.
"Siempre hemos tenido un reclamo y éste ha sido que se castigue a los culpables de ese crimen de lesa humanidad. Que se encarcele al ex presidente Luis Echeverría Álvarez y todos aquellos que aún siguen vivos y que participaron en esos terribles hechos", señaló a la prensa mexicana Guillermo Vázquez, integrante del Comité 68.
De acuerdo a datos oficiales, en la masacre de Tlatelolco fallecieron 37 personas, mientras que organizaciones defensoras de derechos humanos afirman que fueron más de 300.
Para esta edición de la conmemoración, que congregó cerca de unos 8,000 jóvenes, se hizo un homenaje a Raúl Álvarez Garín, uno de los líderes más emblemáticos del movimiento estudiantil mexicano de 1968 y quien murió de cáncer a los 73 años en Ciudad de México el pasado viernes.
La movilización además se llevó a cabo en momentos en que en el estado de Guerrero se busca a unos 43 estudiantes que desaparecieron el pasado fin de semana en la ciudad de Iguala después de protagonizar un incidente con policías que los persiguieron por tomar por la fuerza tres autobuses.
Junto con este incidente, en Iguala el fin de semana se registraron otros dos incidentes violentos que involucraron a jóvenes y policías. En los tres hechos murieron seis personas, 25 resultaron heridas y fueron detenidos 22 agentes.
Por información que permita ubicar el paradero de los jóvenes estudiantes de una escuela docente el gobierno de Guerrero ofreció este miércoles una recompensa de un millón de pesos (unos 74,367 dólares).
Este jueves en Guerrero también miles de estudiantes, familiares y pobladores marcharon por la Autopista del Sol para pedir que se esclarezca la desaparición de los jóvenes. (DPA)