Acción conjunta permitirá pronta recuperación tras huracán: Peña Nieto

El presidente Enrique Peña Nieto destacó las medidas preventivas ante la llegada del huracán Odile, las cuales permitieron que se registrara un saldo blanco, y aseguró que la acción conjunta entre los gobiernos federal y estatal permitirá que las condiciones de normalidad regresen lo más pronto posible.

El mandatario encabezó, el día de ayer, la reunión de evaluación de efectos y el anuncio de acciones de recuperación tras el paso de Odile, donde se informaron facilidades e incentivos a la inversión privada en el estado pues parte de la reconstrucción dependerá de la capacidad de los emprendedores para poner en pie la actividad económica.

En conferencia de prensa estuvieron los titulares de las secretarías de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray; de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza; de Turismo, Claudia Ruiz Massieu, así como el gobernador Marcos Covarrubias, entre otros funcionarios.

El presidente Enrique Peña Nieto expuso que no hay reporte de pérdidas de vidas humanas, es un "saldo blanco" tras el paso del huracán Odile que dejó afectaciones en infraestructura y servicios.

Tras su reunión de evaluación con secretarios de Estado, detalló que lo anterior se deriva del reporte que se tiene de las distintas entidades de información de los gobiernos federal y estatal.

Luego de realizar un sobrevuelo de más de 50 minutos por zonas afectadas, el mandatario reconoció en breve entrevista que lo más urgente es restablecer la energía eléctrica que se estima llevará días, incluso semanas.

Indicó que otra prioridad es la atención a la población afectada y señaló que prácticamente esta zona está incomunicada, toda vez que no hay energía eléctrica por lo que no hay radio ni televisión, además de la falta de telefonía fija y celular.

Sostuvo que en breve el Aeropuerto Internacional de Los Cabos, que fue afectado por el huracán, estaría en operación para que pueda recibir vuelos por la noche para traer abasto.

No obstante, aclaró que no será la única vía toda vez que se utilizará el ferry desde Mazatlán, Sinaloa, para traer lo indispensable.

Apuntó que el reporte preliminar de turistas varados asciende a más 20 mil que se tienen que trasladar a distintos puntos Tijuana, Ciudad de México y Mazatlán para de ahí regresar a sus lugares de origen.

Estimó que esta acción se puede desplegar en dos o tres días y reiteró que lo más importante es brindar a la población los servicios fundamentales, entre ellos agua, energía eléctrica y abasto.

El mandatario federal anotó también que gente incurrió en actos de rapiña en tiendas. Ello, dijo, un poco por la desesperación por falta de agua y otro porque las tiendas no podían realizar ventas por la falta de suministro de energía eléctrica, que derivó en pánico y rapiña que no es aceptable.

Acompañado por los secretarios de Estado y los directores de las comisiones Nacional del Agua (Conagua) y Federal de Electricidad (CFE), supervisó también en un sobrevuelo de más de 50 minutos las afectaciones que dejó el huracán que impactó durante la madrugada del domingo.

Posteriormente el mandatario federal regresó al Aeropuerto Internacional de Los Cabos para sostener la reunión de evaluación de los daños en la entidad.

Previamente constató la salida de tres aviones con pasajeros varados, algunos incluso se acercaron al presidente Peña Nieto para agradecer este puente aéreo para que puedan regresar a sus hogares.

En el recorrido en el aeropuerto de Los Cabos, el mandatario federal observó que desde la torre de control hasta las salas de espera se encontraban dañadas, con vidrios rotos y láminas caídas.