El mayor barco de pasajeros del mundo, que pertenece a la compañía Royal Caribbean, pesa 220 mil toneladas y mide 360 metros de eslora y 65 metros de altura, atracó esta mañana ante la mirada atónita de los que se habían congregado en el Puerto de los Everglades.
Este gigante cuenta con 16 cubiertas, más de 2 mil 700 camarotes y una capacidad para 6 mil 200 pasajeros, los cuales podrán perderse en una suerte de ciudad flotante laberíntica que incluye más de 12 mil plantas exóticas y árboles.
El impresionante interior del crucero ofrece restaurantes, casino, áreas temáticas, zonas de piscinas, un anfiteatro para espectáculos acuáticos, camarotes tipo "loft" y hasta un parque con vegetación exhuberante y una piscina con simulador de olas.
El "Oasis of the Seas", todo un prodigio de ingeniería y diseño en cuya construcción se han empleado cerca de tres años, zarpará por primera vez con pasajeros el próximo 5 de diciembre, y lo hará desde su puerto base en Fort Lauderdale para recorrer las islas del Caribe.
Según la compañía, el alojamiento más asequible en un camarote interior del crucero, que fue construido en el astillero STX de Turku, en Finlandia, costará entre mil 043 y mil 192 dólares.
Este coloso marino de mil 500 millones de dólares es casi un 40 por ciento mayor que el segundo en tamaño, el "Freedom of the Seas", y cuatro veces más pesado que el Titanic.
A finales del próximo año, el buque compartirá su hegemonía con el "Allure of the Seas", un crucero de idénticas dimensiones que está siendo construido también en los astilleros de Turku.