Zapatero apoya a empresarios españoles comprometidos con el crecimiento de Cuba

El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, envió un mensaje de felicitación a los empresarios españoles "comprometidos con el crecimiento económico y el aumento del bienestar social de Cuba".

00006820-original.jpeg

José Luis Rodriguez Zapatero.

El mensaje fue leído anoche durante la cena anual de la Asociación de Empresarios Españoles en Cuba, a la que asistió el ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera de la isla, Rodrigo Malmierca, entre otras autoridades.

"Los datos son elocuentes -dice la carta de Zapatero-: España es el primer país inversor en la isla, superando los  mil 500 millones de dólares".

Agrega que "esta inversión, que han materializado empresas con vocación de permanencia, constituye una garantía de cara al futuro desarrollo de la economía del país".

"Podemos sentirnos orgullosos de la labor que nuestras empresas desarrollan en la isla y para la que cuentan con el aprecio y el respaldo del gobierno de España", afirma el mensaje.

Zapatero reconoce a los empresarios "su labor como puente entre ambos países", y añade que "España se siente muy vinculada a Cuba".

España fue el país con mayor presencia en la XXVII Feria Internacional de La Habana, celebrada esta semana, con un pabellón de mil 518 metros cuadrados y representantes de más de 80 compañías y delegaciones oficiales de la Comunidad de Madrid, el País Vasco, Valencia y de otras autonomías.

Sin embargo, las ventas de España a Cuba cayeron un 37 por ciento entre enero y agosto pasados, en relación con los mismos meses de 2008, informó el embajador español en La Habana, Manuel Cacho.

A su vez, las ventas de Cuba a España disminuyeron en ese periodo un 20 por ciento.

Los empresarios españoles tienen grandes problemas para cobrar lo que les debe el gobierno cubano -600 millones de dólares solo entre proveedores comerciales- y para transferir sus divisas al exterior.

Cuba padece una recesión que obligó a las autoridades a bajar su meta de crecimiento para 2009 del 6 por ciento al 1.7 por ciento, y ha frenado en forma drástica las importaciones después de que éstas quintuplicaron a las exportaciones a principios del año.