Francisco Román ha hecho estas declaraciones durante la conferencia que hoy ha ofrecido en Las Palmas de Gran Canaria, en un ciclo organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), al ser preguntado sobre la polémica que operadoras y proveedores de contenidos mantienen sobre quién tiene que afrontar las inversiones para ampliar la capacidad de la red.
El presidente de Vodafone ha dejado claro que las actuales redes no van a poder soportar el crecimiento del tráfico de datos que está generando la explosión del mercado de dispositivos móviles (se espera que el tráfico de datos se multiplique por cinco en 2015), por lo que serán necesarias inversiones para aumentar su capacidad.
Y se ha preguntado si las operadoras de telecomunicaciones deben seguir soportando en solitario esas inversiones, mientras determinadas empresas proveedoras de contenidos hacen negocio gracias a ellas sin contribuir a los costes que estas generan.
Román ha considerado "absurda" la "pretensión" que existe en Estados Unidos de prohibir que las operadoras pacten con los suministradores de contenidos que determinados tráficos de datos tengan una velocidad mayor o un ancho de banda protegido, porque existen clientes que pagan por ello.
El presidente de Vodafone España ha recalcado que no cuestiona la llamada "neutralidad de la red" como planteamiento, pero cree que "comercialmente" resulta necesario "establecer diferencias".
Ha defendido que la UE debería estar "alerta ante una pretensión de regulación que beneficia grandemente a las compañías proveedoras de contenidos, casi todas de EEUU, y con la que se intenta construir una muralla china que haga que no tengan que participar en las inversiones, pero sí se beneficien de ellas".
"Hay que encontrar mecanismos que aseguren que existe la inversión, que aquellos que invierten tienen retorno y que aquellos que participan en el negocio contribuyen a la inversión", ha argumentado el primer ejecutivo de Vodafone España.
En su conferencia, Francisco Román también ha opinado que España se encuentra en una buena posición para afrontar las oportunidades de negocio e innovación que ofrecerá "la siguiente oleada tecnológica" por la apuesta que ha hecho en los últimos años por las infraestructuras, entre ellas, las de telecomunicaciones.
No obstante, ha hecho un llamamiento a las administraciones para que no perjudiquen esas expectativas y les ha pedido "menos voracidad fiscal" con este sector, que se abran más a la competencia en sus contratos y que simplifiquen el marco regulatorio.
"El despliegue de las redes hoy tiene que enfrentarse a 700 u 800 ordenanzas distintas, según el ayuntamiento. ¿Se imaginan que un yogur tuviera distinta fecha de caducidad en función del municipio?, pues eso pasa hoy con las redes", ha advertido.