Con sus en torno a 700 millones de clientes, China Mobile era una de las únicas grandes compañías de telefonía móvil del mundo que aún no ofrecía el smartphone de Apple.
El problema era una red de datos propia 3G estándar con la que trabajaba la empresa, un obstáculo que quedó eliminado con la ampliación de redes de la próxima generación móvil LTE.
El acuerdo, alcanzado tras largas negociaciones, podría suponer para Apple un fuerte impulso en el ya mayor mercado del mundo para la telefonía móvil, China, donde las grandes empresas ya hacen una parte muy importante de sus negocios con smartphones económicos.