Esta correlación y esta corresponsabilidad de las entidades federativas (estados) es fundamental", señaló en declaraciones a la prensa el fiscal general de México, Arturo Chávez, quien dijo que los tres lugares más problemáticos son Ciudad Juárez (Chihuahua), el estado de Michoacán, y el de Tamaulipas.
El titular de la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía) se reunió con la prensa y señaló que "la base delictiva" de lo que sucede en cada lugar es distinta, por lo que los esfuerzos federales, con el Ejército a la cabeza, deberían ser complementados mejor desde los estados.
En la norteña Ciudad Juárez, fronteriza con la estadounidense El Paso (Texas) y donde unas 3,100 fueron asesinadas este año, "hay un problema de pandillas muy serio" que se fue consolidando durante años y que tiene "raíces sociológicas muy serias".
En Michoacán, oeste del país, existe una organización criminal como La Familia con planteamientos "semidogmáticos" que "confunde el pretender estar actuando para beneficiar a la comunidad" con agredirla.
En el tercer "foco rojo", Tamaulipas, estado del nordeste del país cuyo control se disputan los cárteles del Golfo y Los Zetas, "la esencia es el interés, la ambición" de esos grupos criminales que florecieron gracias a que su actividad delictiva "de alguna manera, a lo mejor indirecta, fue tolerada por muchos ciudadanos", dijo Chávez.
En México operan siete grandes cárteles de la droga que en los últimos años han diversificado su actividad criminal, el más poderoso de los cuales es el de Sinaloa, que dirige Joaquín "El Chapo" Guzmán.
Desde que asumió el poder el presidente de México, Felipe Calderón, el Ejército ha sido puesto al frente de la estrategia de combate frontal del Ejecutivo contra la delincuencia, que se ha saldado con importantes capturas y muertes de líderes de las organizaciones.
Los comentarios del fiscal general surgieron después de que el llamado Observatorio Nacional Ciudadano para la Seguridad, la Justicia y la Legalidad (ONCSJL) expresara en un mensaje público su "gran frustración" con la evolución de la violencia.
Según la PGR, de enero a noviembre de este año la cifra de muertes violentas es de 12,456, la mayor desde 2006.
"México se acerca a la conclusión de 2010 en un contexto creciente de violencia e inseguridad, que ha afectado a todas las capas de la sociedad", lamentó la Procuraduría.
En respuesta a la postura del Observatorio el titular de la PGR urgió a las autoridades de cualquier nivel de gobierno en México a actuar sin demora.
"No es ni ética ni desde ningún punto de vista correcto el que cada decisión tengamos que sopesarla políticamente" sino que es tiempo de actuar "cada uno en el ámbito de su competencia", agregó.
La situación de la violencia en México preocupa incluso más allá de las fronteras de este país, como dejó claro el diario The New York Times hoy en uno de sus editoriales dedicado al trasiego de armas desde EU hacia México.
El rotativo lamentó que el Congreso estadounidense, "sumiso" a las presiones del "lobby" de la industria armamentística, no haya acabado con el vacío legal que permite la venta de rifles a los criminales mexicanos o sus intermediarios sin necesidad de informar a las autoridades.
"Como la guerra contra el narcotráfico pone de manifiesto, el uso de este tipo de armas se ha duplicado en los últimos cinco años porque (...) son fáciles de obtener en toda la frontera", añadió el editorial del rotativo neoyorquino.
El diario manifestó además que una posible solución a la situación podría ser que el presidente estadounidense, Barack Obama, emita una orden que alerte de este problema a la Asociación Nacional del Rifle (ANR).
"Si hace falta una orden presidencial para acabar con la carnicería, el presidente Obama no debería dudar", concluyó el periódico.