El Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses hizo entrega de los restos del narcotraficante al Semefo y su traslado fue a sirena abierta de los vehículos de dicha dependencia y de los soldados encargados de su custodia.
De esta forma, el cadáver de Coronel Villarreal, quien en vida fue cabecilla del cártel de Sinaloa y brazo derecho de Joaquín “el Chapo” Guzmán, es custodiado por un gran número de militares que están instalados en la calle Belén del barrio de El Retiro, donde se localiza el Semefo.
El narcotraficante de origen duranguense murió ayer en el enfrentamiento registrado durante el operativo que realizó el Ejército Mexicano en el fraccionamiento Colinas de San Javier, en Zapopan, Jalisco.
Las fincas en donde se escondía “Nacho” Coronel permanecen aseguradas y los militares no permiten que nadie se acerque al lugar.