De acuerdo con el periódico, los satélites malasios recibieron varias horas después de la última posición registrada en los radares señales (pings) del avión.
De acuerdo con los investigadores citados por el diario, esto significa que el avión con 239 personas a bordo seguía intacto varias horas después de perder el contacto con los controladores del tráfico aéreo malasio.
El ministro de Transporte malasio desmintió esta información, mientras que Boeing no quiso manifestarse al respecto.
El jueves, los investigadores ya habían desacreditado un reporte del "Wall Street Journal" que aseguraba que el avión voló unas cuatro horas más después de su último contacto.
Según el periódico, los investigadores de la aviación civil estadounidense y de Seguridad Nacional llegaron a esta conclusión en base a datos "que se descargan automáticamente y son enviados a tierra" por los motores del Boeing.
El periódico destaca que estos datos apuntan a que la aeronave pudo haberse desplazado cientos de kilómetros de donde se cree que podría haberse estrellado.
De acuerdo con el reporte del "Wall Street Journal", los expertos estiman que el avión voló en total unas cinco horas, pero pasada una se perdió el contacto con la torre de control cuando el aparato se desplazaba entre Malasia y Vietnam como parte del vuelo de Kuala Lumpur a Pekín.