El envío se produce meses después de que el Gobierno malasio anunciara controles más estrictos para evitar la importación ilegal de residuos y enviara el pasado mayo un primer cargamento de cinco contenedores de vuelta a España.
"El Gobierno continuará luchando con la contaminación transfronteriza", indicó la ministra malasia de Medio Ambiente, Yeo Bee Yin, en su cuenta de Twitter.
De los 150 contenedores, 43 fueron enviados a Francia, 42 a Reino Unido, 17 a Estados Unidos, 11 a Canadá y 10 a España, así como a Hong Kong (9), Japón (5), Singapur (4), Portugal (3), China (3), Bangladesh (1), Sri Lanka (1) y Lituania (1).
Desde que China prohibió la importación de residuos plásticos en 2018, el tráfico se desvió en gran parte a países del Sudeste Asiático como Malasia, Filipinas e Indonesia.
El pasado mayo, el Gobierno malasio anunció su intención de devolver a sus países de origen decenas de contenedores con miles de toneladas de plástico importados ilegalmente.
Otros países como Filipinas e Indonesia también se comprometieron a devolver los residuos ilegales llegados a sus puertos desde países desarrollados.
El Convenio de Basilea impone estrictos límites y controles a la exportación de residuos, incluido el plástico, desde países desarrollados a otros menos desarrollados.
Este acuerdo, que entró en vigor en 1992, nació con el objetivo de reducir el "colonialismo tóxico", es decir, el envío de residuos contaminantes de países ricos a pobres, lo que algunos países han pedido que se prohíba totalmente.