El gobierno rechazó en una declaración las “agresiones” de Pence cuando asistió el lunes a la Organización de Estados Americanos (OEA), donde criticó la credibilidad de las elecciones de este 20, pidió nuevas sanciones contra funcionarios venezolanos y la suspensión del país de la OEA.
Señaló que definitivamente en los últimos años la OEA ha reafirmado su "condición originaria de organismo colonialista, al servicio de las ambiciones de dominación de Washington en nuestra región".
Refirió que los ataques de Mike Pence procuran perturbar la paz del pueblo venezolano, repitiendo la nefasta práctica de intervenciones estadunidenses que tanto daño han causado en Latinoamérica y el Caribe.
"La administración de Donald Trump no admite la existencia de pueblos soberanos que no están dispuestos a ceder ante las pretensiones imperialistas y supremacistas del régimen estadunidense", apuntó.
Agregó que "al pretender dictar órdenes a los Estados miembros para que se sumen a la campaña de agresiones contra Venezuela, los voceros guerreristas de Estados Unidos violan flagrantemente el derecho internacional en el seno de un organismo multilateral que debería velar por su respeto".
Esta conducta arrogante de Estados Unidos no hace más que reafirmar la decisión de Venezuela de renunciar a su membresía en la OEA, instancia que, lejos de promover la diplomacia y la cooperación entre los países de la región, ha sido un instrumento de agresión que revive el colonialismo que nuestros libertadores derrotaron hace más de 200 años, consideró.
"El señor Pence, en su cinismo supremacista, pretende encubrir los daños que su gobierno ha provocado en la sociedad venezolana a través de medidas coercitivas unilaterales, con una falsa preocupación humanitaria cuyo objetivo es torcer la voluntad del pueblo para reapropiarse de las riquezas y recursos naturales de nuestro país", indicó.
Igualmente, recalcó que el 20 de mayo se realizarán las elecciones presidenciales en Venezuela y el pueblo defenderá con votos su derecho a decidir sin intervenciones de ningún tipo.
"El mundo entero será testigo de una nueva expresión popular, que reafirmará el carácter democrático de la República Bolivariana de Venezuela", afirmó.
En esos comicios el presidente Nicolás Maduro buscará una reelección, ante un rival, Henri Falcón, que no cuenta con todo el apoyo de la oposición, la cual declinó participar por considerar estos comicios fraudulentos.