El portaaviones Abraham Lincoln llegó al mar de Arabia, donde ya se encuentra su par Carl Vinson, un par de semanas después que Irán advirtiera a Washington de que no envíe esas naves al estrecho de Ormuz, indicaron fuentes militares.
El John Stennis, otro de los portaaviones con propulsión nuclear de Estados Unidos, salió de la región hace pocos días y navega ahora por el oeste del Pacífico.
Con la llegada del Lincoln, se restablece la presencia de dos portaaviones en el área, como requiere la estrategia establecida por el Pentágono para la zona.
El miércoles, el secretario de Defensa, Leon Panetta, dijo que la presencia naval estadounidense no cambiará y que el nivel actual es suficiente para lidiar con cualquier situación que pudiese surgir.
El golfo ha sido escenario de tensiones entre Estados Unidos e Irán en las últimas semanas a raíz de las amenazas de Teherán de cerrar el estrecho de Ormuz, la puerta al golfo Pérsico y el petróleo que contiene.
Con un desplazamiento de más de 100,000 toneladas, el Lincoln tiene una tripulación naval de unos 3,200 soldados, y la tripulación aérea suma unos 2,480 soldados.
La pista de despegue y aterrizaje de su dotación de aviones cubre casi dos hectáreas y cuando va en misiones transoceánicas el Lincon es el núcleo de un grupo de batalla que incluye cruceros con misiles guiados, destructores, fragatas, naves de abastecimiento y submarinos.
El Carl Vinson, acompañado de un crucero y un destructor, había llegado a la zona el pasado 11 de enero para reemplazar al John Stennis.