Dos tercios de los 175 muertos son civiles, mientras que el resto son milicianos, precisó el Ministerio del Gobierno de Hamás en un comunicado.
Por parte israelí, cuatro civiles y dos militares perdieron la vida por el impacto de los alrededor de 1,500 cohetes y proyectiles de mortero lanzados desde Gaza durante la operación.
Durante los ocho días que duró la ofensiva, iniciada con el "asesinato selectivo" del líder del brazo armado de Hamás, Ahmed Yabari, el Ejército israelí lanzó unos 1,500 bombardeos, que causaron daños materiales por valor de 300 millones de dólares (232 millones de euros), según un informe de la Cámara de Comercio de la franja.
Hoy, el representante de la Unión Europea en Gaza y Cisjordania, John Gatt-Rutter, firmó en Gaza un acuerdo de apoyo a las actividades de la agencia de la ONU de ayuda a los refugiados palestinos (UNRWA) en los ámbitos de salud, educación y servicios sociales por valor de 11.5 millones de euros (14.8 millones de dólares), informaron ambas organizaciones en un comunicado conjunto.