Los cuatro hacen esa propuesta en una carta conjunta, -con fecha del 10 de marzo y publicada hoy por el Elíseo-, dirigida al presidente de turno de la Unión Europea (UE) y jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y al presidente de la Comisión, Jose Manuel Durao Barroso.
Concretamente, solicitan a Bruselas que abra una investigación "lo antes posible" para determinar "el papel y el impacto de la especulación con CDS sobre obligaciones (deuda soberana) de los Estados europeos".
Si esa investigación revela la existencia de "abusos de mercado" o pone en evidencia que la especulación tiene "un impacto considerable sobre los tipos de interés", prosigue la misiva, "debemos examinar rápidamente medidas y, llegado el caso, adoptar los textos legislativos o reglamentarios necesarios para poner fin a eso".
El análisis de la Comisión, añaden, debería servir para la adopción de medidas concretas como la imposición de un periodo mínimo de posesión de CDS (Credit Default Swaps, en inglés) o la prohibición de "transacciones especulativas" sobre este tipo de productos financieros derivados de crédito que, a cambio de una prima, obligan al suscriptor a asumir los impagos que se produzcan.
Sarkozy, Merkel, Juncker y Papandreu apuestan además por "intensificar las iniciativas europeas" dirigidas a reforzar la transparencia del mercado de los productos derivados, de acuerdo con las decisiones adoptadas por el G-20 en ese sentido.
"Europa debe asumir el liderazgo" en esta cuestión, según los cuatro dirigentes, que concluyen su carta señalando que el Ejecutivo comunitario "deberá presentar el resultado de sus investigaciones y las medidas posibles" a adoptar en la próxima reunión del Consejo de ministros de Economía y Finanzas (Ecofin) de los Veintisiete.