"Hubiese sido mejor que el Consejo de Seguridad de la ONU se ocupase de Arabia Saudí", dijo hoy Mohammed al Bujaiti, miembro del politburó del Movimiento Hutí a la agencia dpa en Saná.
"Los ataques aéreos saudíes van contra infraestructuras y ciudadanos, para que mueran de hambre y se les obligue a entregarse", agregó.
El Consejo de Seguridad aprobó el martes un embargo de armas y sanciones contra los rebeles hutíes. Los insurgentes del norte de Yemen tomaron Saná bajo su control en septiembre pasado. Una coalición internacional liderada por Arabia Saudí bombardea desde hace tres semanas posiciones y arsenales de los hutíes.
Los ataques aéreos y los combates sobre el terreno han causado numerosas víctimas entre la población civil. Según estimaciones de la ONU, en las últimas cuatro semanas han muerto al menos 736 personas y 2,700 resultaron heridas. (DPA)