Desde un barco anclado en la bahía de Sebastopol, el jefe del Kremlin asistió al desfile de diez buques de guerra, así como 70 aviones de combate y helicópteros. La televisión estatal rusa transmitió en vivo los festejos en la ciudad portuaria crimea.
La visita de Putin a la península anexionada por Rusia en marzo, criticada en Occidente, es vista por los observadores como una demostración de fuerza ante el grave conflicto que vive Ucrania por la multiplicación de los movimientos separatistas prorrusos.