Según el portavoz de la misión de la Organización del Tratado del Norte (OTAN) en Libia, el coronel canadiense Roland Lavoie, los rebeldes alcanzaron zonas centrales de Sirte, ciudad natal de Gadafi, y los civiles han podido empezar a recibir ayuda humanitaria.
“El valor de esta evolución no debe ser subestimado”, señaló Lavoie en rueda de prensa.
El coronel resaltó que Sirte tiene un “carácter simbólico” por ser uno de los últimos focos de resistencia pro-Gadafi y la única localidad que les permite acceso al mar.
Por otra parte, el control por los gadafistas de Bani Walid no tiene gran importancia desde el punto de vista estratégico, ya que “afecta a una parte muy pequeña de la población”, explicó.
La portavoz de la OTAN, Oana Lungescu, reiteró la determinación de los aliados de continuar la misión en Libia “hasta que no haya más amenazas sistemáticas y significantes” y afirmó que “no dejaremos el trabajo por la mitad”.