"Los invito a rezar para que la Ciudad Santa, querida por los judíos, cristianos y musulmanes, que en estos días ha sido testigo de diversas tensiones, pueda ser siempre más signo y anticipo de la paz que Dios desea para toda la familia humana", dijo el pontífice, según Radio Vaticano.
Las autoridades israelíes cerraron el jueves la mezquita de Al Aqsa en la Ciudad Vieja de Jerusalén tras el intento de asesinato de un judío de la extrema derecha. La policía israelí mató al hombre palestino señalado como el autor del ataque. El viernes la mezquita se abrió parcialmente.
El Papa Francisco se dirigió desde la ventana de su estudio a todos los fieles congregados en la Plaza de San Pedro tras el rezo del Angelus con motivo de la festividad de Todos los Santos.