Los ministros de la Organización del Tratado del Atántico Norte (OTAN) y su par ruso, Serguei Lavrov, acordaron hoy en su segundo y último día de reunión en Bruselas nuevas iniciativas "que fortalecerán nuestra cooperación, y establecerán una mayor confianza entre nosotros", dijo el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen.
Esto incluye un programa para destruir decenas de miles de bombas y proyectiles obsoletos en la región rusa de Kaliningrado, y la intención de una futura colaboración en el desminado en Afganistán, indicó Rasmussen.
Ambas partes también manifestaron su apoyo para la destrucción del arsenal de armas químicas sirias, que está siendo llevado a cabo por la ONU y la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), e hicieron un llamado a Damasco para que garantice la "seguridad" de la misión.
Si bien Ucrania no figuraba en la agenda de hoy de la reunión de la alianza atlántica, varios ministros mencionaron el tema, añadió Rasmussen.
El ex país soviético fue escenario de una gran ola de protestas, luego de que su gobierno decidiera la semana pasada no firmar un acuerdo de asociación ya negociado con la Unión Europea porque teme las consecuencias que eso podría acarrearle en el comercio con su vecina Rusia.
El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, criticó a la OTAN por el comunicado en el que censura la violencia contra los manifestantes en Ucrania y sostuvo que Occidente no debe inmiscuirse en el conflicto en la ex república soviética.
El martes, los ministros de Exteriores de la alianza militar criticaron la violencia usada contra los manifestantes ucranianos que reclaman la firma de un pacto de asociación del país con la UE.
Lavrov consideró hoy que el texto da "una imagen completamente deformada de la situación". "Llamamos a que nadie se inmiscuya", añadió.
En relación a la intención de unirse a la alianza atlántica por parte de Georgia, cuyas provincias separatistas Abjazia y Osetia del Sur son reconocidas como independientes por Rusia, Lavrov habló de una "nueva realidad en el Transcáucaso, que debería ser reconocida".
Lavrov manifestó su esperanza de que llegue el día en el que no se necesiten asegurar los perímetros de los países pero dijo que en la actualidad, "los límites y los cercos en las fronteras deben ser protegidos".
Sin embargo, Rasmussen, quien también fue anfitrión de una reunión con Georgia este miércoles, expresó su "gran preocupación por la reanudación de las recientes actividades de construcción de cercos y otros obstáculos" y pidió que sean removidos, "debido a que tienen efecto sobre las vidas de las personas e impiden la solución de conflictos".
Los ministros también discutieron sobre los planes de la OTAN de establecer un escudo de defensa misilística en Europa impulsado por Estados Unidos como protección frente a las amenazas de Irán, pero que Moscú teme pueda ser usado para interceptar a los misiles rusos.
Lavrov señaló que el acuerdo alcanzado el mes pasado entre Irán y los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania para limitar el programa nuclear de Teherán hará innecesario el planeado escudo de defensa.
"Si el programa nuclear iraní es suspendido por completo y si el programa nuclear iraní está bajo estricto control del Organismo Internacional de Energía Atómica, entonces no habrá razones para crear un sistema de defensa misilístico en Europa", opinió el ministro ruso.
Al respecto, el ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Guido Westerwelle, dijo que existe una "clara conexión" entre ambos temas. Previamente, había alabado el "importante" papel de Rusia para alcanzar el acuerdo con Irán.
"Cuanto mayor sea el progreso que hagamos juntos sobre el programa nuclear iraní, mayores serán las consecuencias respecto del programa de defensa misilística... y las probabilidades de superar los problemas" con Rusia, indicó Westerwelle.
Los ministros de la OTAN también se reunieron con el ministros del Exterior en funciones de Afganistán, Zarar Ahmad Osmani, y el del Interior, Mohammad Daudzai, para reiterar el mensaje de que el país debe firmar pronto el acuerdo de seguridad con Estados Unidos si quiere ayuda extranjera después de 2014.
El acuerdo, que establece la base legal para la presencia de tropas estadounidenses en Afganistán después de 2014, allanaría el camino para un arreglo similar con la OTAN, cuya Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) será reemplazada por una misión de entrenamiento y apoyo.
Sin embargo, el presidente afgano, Hamid Karzai, dijo que no firmará a menos que se den ciertas condiciones, entre ellas la prohibición de registrar viviendas afganas y la liberación de los prisioneros afganos detenidos en la prisión de Guantánamo.
"Todos los ministros en la reunión de hoy enviaron un mensaje muy, muy claro al gobierno afgano de que es un tema de urgencia que debe firmar", dijo Rasmussen, quien añadió que no tiene noticias acerca de cuándo va a ocurrir eso.