"Desde el 23 de junio de 2014 al menos 19 civiles sunitas fueron asesinados y otros 19 heridos en un aluvión de asesinatos selectivos y secuestros (...) en todos los casos la comunidad local denunció que las víctimas fueron atacadas por su fe", señaló el responsable de la ONU para cuestiones de derechos humanos en Irak, Francesco Motta.
"Amenazas anónimas también se emitieron contra varias mezquitas y una prominente organización sunita, advirtiendo a los sunitas que abandonaran Basora o enfrentarían la muerte", añade Motta, alegando que en algunas áreas las casas de sunitas fueron marcadas con una "X". (DPA)