Según las primeras informaciones dadas a conocer hoy en conferencia de prensa, se trata de un profesional de la salud de 33 años que colaboró con la organización Médicos Sin Fronteras (MSF) en Guinea, de donde regresó vía Europa hacia Estados Unidos.
Medios locales apuntan que el paciente, actualmente aislado en una institución hospitalaria estadounidense, partió el 14 de octubre de África hacia Europa y continuó viaje, días después, desde Bruselas hacia Nueva York, adonde arribó el 17 de octubre.
Las autoridades sanitarias subrayaron este jueves que el individuo, conociendo los riesgos a los que se había expuesto durante su labor en África, se tomó la temperatura dos veces al día desde que partió de Guinea y no presentó fiebre hasta ayer en la mañana.
El anuncio se vio acompañado por palabras de tranquilización dirigidas a la población local. "Las posibilidades de que el neoyorquino promedio contraiga ébola siguen siendo muy pequeñas. La ciudad se ha preparado para este caso durante meses", dijo incluso en español el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, quien habló en conferencia de prensa junto con el gobernador del Estado, Andrew Como, y profesionales del área de salud.
Tres personas que estuvieron en estrecho contacto con el médico, entre ellas, su novia, estarán bajo observación durante los próximos 21 días.
"Todos esperamos que este día no llegara. Pero estamos en Nueva York y aquí vienen personas de todo el mundo. La noticia no nos podía sorprender", señaló por su parte Cuomo.
Desde su regreso al país, el paciente tomó el subterráneo, un taxi e incluso fue a jugar al bowling la noche previa a presentar los síntomas. No obstante, según se dejó en claro, fue ingresado en un hospital ni bien detectó los primeros síntomas, momento a partir del cual la enfermedad se vuelve contagiosa.
"Es muy dificíl contagiarse ébola. Estar en el mismo subterráneo o en el mismo coche o vivir cerca de una persona con ébola no implica en sí mismo un riesgo", explicó Blasio.
Horas antes la Unión Europea (UE) manifestó su intención de aumentar a 1,000 millones de euros los fondos para luchar contra el virus. (DPA)