Napolitano será la oradora principal en el almuerzo de la XV Conferencia Anual sobre Asuntos Fronterizos en el Congreso, que cada año reúne en Washington a líderes políticos de Estados Unidos y México para abordar asuntos de interés bilateral y regional.
Napolitano acudirá al encuentro anual un día después de que el gobierno de Washington confirmara que está echando mano de aviones no tripulados en suelo mexicano para detectar a violentas bandas de narcotraficantes.
La operación "muestra la excelente cooperación que tenemos actualmente con México", dijo el miércoles el portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner.
Toner no dio detalles sobre la operación de vuelos no tripulados, que fue desvelada el miércoles por el diario The New York Times.
Estos aviones no tripulados ya han sido utilizados en la zona fronteriza, pero es la primera vez que Estados Unidos confirma que sobrevuelan dentro del territorio mexicano, con la venia de las autoridades de ese país.
Al parecer, el Pentágono inició estos vuelos el mes pasado, después del ataque contra dos agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) por un grupo de hombres armados. Uno de los agentes, Jaime Zapata, falleció, y el otro resultó herido.
Con estos vuelos, las autoridades han podido localizar a varios sospechosos vinculados con el asesinato de Zapata, indicaron fuentes oficiales del Pentágono, citadas por The New York Times.
Pese a que los Gobiernos de Washington y Los Pinos destacan su firme cooperación antidrogas, la "narcoviolencia" en México ha venido a teñir la agenda bilateral y, tras el ataque del pasado 15 de febrero, ha aumentado las tensiones.
Este año, la conferencia incluirá discusiones sobre cómo fortalecer la cooperación en materia de seguridad, así como el fomento del comercio bilateral y el turismo, en unos momentos en que Estados Unidos y México afrontan retos económicos y de seguridad, indicaron los organizadores.
Otro tema de la conferencia será el del desarrollo socioeconómico en la zona de la frontera común, que abarca cerca de 3,200 kilómetros y donde viven alrededor de 12 millones de personas.
Más de 35,000 personas han muerto por la "narcoviolencia" en México desde 2006, cuando el presidente Felipe Calderón ordenó la militarización del combate a los carteles de la droga.