El experto canadiense trabajaba en tareas de desminado en Misrata, localidad que durante la guerra entre los rebeldes libios y régimen del fallecido Muamar el Gadafi fue objeto de un duro asedio de varios meses, y en Zintan, en el norte del país.
El levantamiento popular contra el régimen gadafista que estalló en febrero de 2011 desembocó en un conflicto armado que se prolongó hasta el 20 de octubre, cuando las fuerzas rebeldes tomaron Sirte, el último bastión de Al Gadafi, que murió ese mismo día poco después de ser capturado.