La jornada de 24 horas que iniciará el próximo 23 de septiembre marcará igualmente el inicio de una nueva campaña nacional tendiente a alentar el registro de más personas como votantes, y a que éstas sufraguen en las elecciones de 2016, especialmente entre la comunidad de inmigrantes hispanos.
Eliseo Medina, presidente de la agrupación Mi Familia Vota, dijo que este llamado busca renovar la lucha a favor de la causa migratoria con miras a lograr la aprobación de una amplia reforma “que refleje lo que somos como gente y como nación”.
“Pedimos también a las comunidades que se sumen a nosotros el 24 de septiembre en un día nacional de oración a favor de las familias de inmigrantes, del Congreso y del país, para avanzar y solucionar este urgente tema con un espíritu de unidad y hermandad”, dijo.
En conferencia de prensa junto a un grupo de líderes civiles, sindicales y religiosos, Medina dijo que la expectativa es que el discurso del Papa ante el Congreso ese día pueda llevar a reabrir el debate migratorio “honesto que nos lleve a una solución que sea consistente con los principios de todas nuestras tradiciones de fe”.
El ex secretario tesorero del Sindicato Internacional de Trabajadores de Servicios (SEIU) indicó que el propósito no es dejar la reactivación de este debate enteramente en manos del Congreso, y por ello el llamado a una mayor participación en la vida social y política, especialmente entre los inmigrantes.
“Si usted califica para ser ciudadano, hágalo. Si usted es ciudadano regístrese para votar, y si usted está registrado, vote, porque nuestra voz es nuestro voto”, exhortó.
A decir de la voceros de la Arquidiócesis de Washington, se espera que el Papa aborde el tema migratorio en el discurso en inglés que pronunciará el próximo 24 de septiembre ante una sesión bicameral del Congreso estadunidense, y con el que hará historia como el primer jefe de la iglesia católica en hablar desde esa tribuna.
El discurso será una de las cuatro intervenciones públicas que el Papa realizará durante su estancia en esta capital, a donde arribará la tarde del 22 de septiembre procedente de Cuba, antes de partir a Nueva York y posteriormente a Filadelfia, donde presidirá los trabajos del Encuentro Mundial de la Familia.
El cardenal Theodore McCarrick dijo que la expectativa es que el discurso del Sumo Pontífice “pueda cambiar corazones” entre los legisladores para que revivan el tema migratorio, suspendido después de que los republicanos en la cámara baja rechazaron discutir una iniciativa de reforma aprobada por el Senado en el 2012.
“No sabemos exactamente lo que el Santo Padre va a decir, pero sabemos lo que ha dicho, y él ha sido un fuerte promotor a favor de los refugiados, inmigrantes, personas afectadas por el tráfico de personas y los desplazados”, dijo el prelado en conferencia de prensa.
Medina reconoció que es difícil anticipar cuál será la respuesta de los legisladores al discurso del pontífice, “pero no hay que olvidar que ese día el Papa no sólo será escuchado por quienes estarán en ese recinto, sino que también por 300 millones de personas”, dijo en alusión a la población de Estados Unidos.
Organizadores de la jornada de oración, en el marco de la cual se planean diversas actividades, incluidas marchas a favor de la migración, explicaron que aún se trabaja en los detalles y la logística, por lo que habrá anuncios adicionales en los días siguientes.