En una conferencia de prensa ofrecida este jueves en el Palacio Miraflores (sede del Gobierno), Maduro acusó a los partidos opositores que incitan la violencia a través de bandas armadas que se mezclan en las protestas antigubernamentales que desde principios de abril se repiten en esta nación sudamericana.
'Tienen dinero y armas, drogan a los muchachos con Captagon (la droga yihadista) para que pierdan el miedo. Han puesto a esos grupos enmascarados con equipos que cuestan miles de dólares, no han hecho más, porque no los hemos dejado', aseveró el mandatario.
El jefe de Estado ratificó la voluntad de su gobierno de establecer un diálogo con la oposición, bajo una agenda que promueva la paz y estabilidad del país.
'Mantengo contactos con la oposición, pero son reuniones secretas, pero yo quiero que tengamos un diálogo con agenda, es necesario para la paz del país', subrayó Maduro y agregó que propuso como primer punto 'que desmovilicen a sus grupos de la plaza Altamira (Chacao) y dejen de llevar niños a sus protestas'.
Si quieren marchar por los próximos 200 días -añadió-, está bien háganlo, pero sin destruir, sin quemar, sin enmascarados, sin grupos violentos.
También llamó a la directiva de la Asamblea Nacional (Parlamento), manejada por la ultraderecha, a salir del desacato, volver a la legalidad y retomar sus funciones como Poder Legislativo.
Maduro insistió que, como respuesta a los planes golpistas de la ultraderecha, el pueblo venezolano se prepara a través de la Asamblea Nacional Constituyente para un nuevo ciclo victorioso que conjure las amenazas contra la estabilidad del país.