Carter, de 86 años, fue recibido en el aeropuerto internacional de esta capital por el canciller Bruno Rodríguez.
Washington espera que el Nobel de la Paz 2002 abogue por la liberación del contratista estadunidense Alan Gross, condenado aquí a 15 años de prisión, acusado de “atentar contra la independencia del Estado”.
Carter tiene programado reunirse la tarde de este lunes con el arzobispo de La Habana, cardenal Jaime Ortega.
Oretga fue el mediador en el proceso que culminó la semana pasada con la liberación de 52 disidentes que restaban del llamado Grupo de los 75, encarcelados desde la primavera de 2003, de los cuales 40 viajaron a España, que ofreció sus buenos oficios.
Poco antes de su entrevista con el purpurado, el exmandatario estadunidense visitará la sede del Patronato de la Comunidad Hebrea de Cuba, según el programa divulgado por el Centro de Prensa Internacional, dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El martes tiene previsto visitar el Convento de Belén, en el Centro Histórico de la capital de Cuba. Más tarde se reunirá en el Palacio de la Revolución con Castro.
Alrededor del mediodía del miércoles, poco antes de su partida, está prevista una conferencia de prensa.
El Centro Carter informó que la visita se realiza por invitación del gobierno de Cuba y que el exmandatario estará acompañado por su esposa Rosalynn.
Durante su estancia en La Habana, Carter sostendrá varias reuniones para “conocer las nuevas políticas económicas y detalles sobre el próximo Congreso del Partido Comunista, además de analizar formas de mejorar las relaciones entre Cuba y Estados Unidos”, indicó el Centro.
“Este viaje es la continuación de su visita a Cuba en Mayo de 2002. Es una misión privada y no gubernamental, auspiciada por el Centro Carter”, agregó la fuente.
La anterior estancia de Carter en La Habana tuvo, entre otros hitos, su reunión con el entonces presidente Fidel Castro y la conferencia que pronunció en el aula magna de la Universidad de La Habana.