Ambos municipios han sido declarados "zonas seguras" después de que unidades de las fuerzas armadas los "limpiaran" de presuntos terroristas armados.
La agencia, que cita una fuente militar, agregó que los efectivos del orden hallaron 25 artefactos explosivos en una vivienda de Al Hameh convertida por los terroristas en un fábrica de bombas.
En ese municipio, los grupos de la oposición denunciaron ayer el descubrimiento de más de una decena de cadáveres pertenecientes a miembros de dos familias ejecutados por disparos por las fuerzas del régimen.
El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de que los leales al presidente, Bachar al Asad, han lanzado hoy una campaña de arrestos en el barrio de Al Qabun y en el suburbio de Barze, en Damasco, lo que ha causado el desplazamiento de los residentes de estas zonas.
Asimismo, subrayó que se registraron enfrentamientos entre los efectivos del régimen y los rebeldes en las áreas de Shabaa, Hatita, Al Turkoman, Meliha, Deir al Safir y Zabde, en los alrededores de la capital.
Las fuerzas del régimen bombardearon también la población de Zabadani, en las afueras de Damasco, al igual que varias zonas de Homs (centro), Deraa (sur), Deir al Zur (este) y Alepo (norte), indicó el mismo grupo.
La Comisión General de la Revolución Siria destacó que los bombardeos en la provincia de Homs se centran en la localidad de Al Qoseir, uno de los bastiones de la oposición, y añadió que las autoridades practican detenciones en Hama (centro).
Sana apuntó que en Alepo, la segunda ciudad del país, el ejército mató a varios supuestos terroristas en barrios como el de Hamman al Bayada y el de Hanano, y en las afueras de la localidad.
Estas informaciones no han podido ser verificadas de forma independiente debido a las restricciones impuestas por las autoridades sirias a los periodistas para trabajar.
Entretanto, representantes de los principales partidos y fuerzas políticas sirias que apoyan al régimen de Al Asad se reunieron hoy en un hotel de la capital para abordar la situación el país.
La televisión siria explicó que el objetivo de la conferencia es rechazar injerencias extranjeras, pedir a los grupos armados que abandonen la violencia y solicitar el inicio de un diálogo nacional.
El conflicto que vive Siria desde marzo de 2011 ha causado ya unos 25,000 muertos, mientras que 2.5 millones de personas necesitan ayuda humanitaria y más de 250,000 se han refugiado en los países vecinos, según Naciones Unidas.