"La situación humanitaria de Yemen empeora con el paso de las horas", afirmó el coordinador humanitario de la ONU para el país, Johannes van de Klaauw.
La guerra se extendió a 15 de las 22 provincias del país, apuntó Van der Klaauw. Según el coordinador de la ONU, la vida de millones de personas está amenazada no sólo por los combates y bombardeos aéreos, "sino por la rápida desaparición de recursos fundamentales, como los suministros médicos, el agua potable o los alimentos".
Cerca de 16 de los 25 millones de habitante del país necesitaban ayuda para cubrir sus necesidades más básicas ya antes de que la coalición liderada por Arabia Saudí comenzase a bombardear posiciones de los rebeldes hutíes.
La petición de la ONU llega el mismo día en que dos aviones con suministro médico lograron aterrizar en la capital, Saná, que se encuentra tomada por los hutíes. Se trata de la primera llegada de ayuda desde el inicio de los bombardeos de la coalición liderada por Riad.
Uno de los aviones de ayuda fue enviado por el Comité Internacional de la Cruz Roja y transportaba 16,4 toneladas de material. La organización anunció el envío de un segundo avión en los próximos días. El otro aparato que aterrizó hoy en Saná pertenece a la Agencia de la ONU para la Infancia, UNICEF, que entregó otras 16 toneladas de material médico y agua.
Los rebeldes hutíes conquistaron hace tiempo Saná y otras partes del país y ahora avanzan hacia la ciudad costera de Adén combatiendo contra los seguidores de Hadi, que tuvo que huir de Yemen.
Decenas de personas murieron o resultaron heridas en un atentado suicida perpetrado contra una reunión de hutíes en Behan, una importante ciudad de la provincia de Shabwa, informó a dpa un periodista local. El atacante, del que se sospecha que pertenece a Al Qaeda, embistió con un vehículo cargado de explosivos el lugar en que se celebraba la reunión.
El ataque se produjo un día después de que los hutíes tomasen la ciudad petrolera de Atak, en Shabwa. Los rebeldes sunitas intentan capturar Shabwa para tener acceso a la provincia petrolera de Mareb, en el este del país. Los ataques de la coalición internacional se concentran ahora en esa zona del país.
En tanto, el Parlamento paquistaní se mostró hoy en contra de apoyar a Arabia Saudí en el conflicto de Yemen.
"Pakistán debería permanecer neutral en el conflicto", afirma una resolución aprobada tras cinco días de debates. Aun así, Pakistán estaría junto a Arabia Saudí si la integridad territorial de este país se viese amenazada.
"La resolución fue adoptada por unanimidad. Refleja el pensamiento colectivo de la cúpula política del país", afirmó el presidente del Parlamento, Ayaz Saqid. Al haber sido apoyada por todos los países, se espera que el gobierno paquistaní siga la resolución.
Durante el debate parlamentario, el ministro de Defensa, Khawaja Asif, afirmó que Arabia Saudí pidió a Pakistán soldados, aviones y barcos de guerra.
El ministro de Defensa iraní, Yawad Zarif, visitó Islamabad esta semana. Según la prensa, Zarif presionó a la cúpula militar y política paquistaní para que no respondiese a la petición de ayuda de Arabia Saudí, principal adversario de Irán en la zona. Islamabad es un estrecho aliado de Riad, pero también cuida las relaciones con Teherán. (DPA)