Los combatientes kurdos fueron apoyados por ataques aéreos de Estados Unidos y de sus aliados, explicó hoy un funcionario kurdo.
Al menos 30 extremistas murieron durante los enfrentamientos sin que se conozca el número de bajas por parte kurda.
La presa de Mosul es la mayor que existe en el país y se considera de importancia estratégica porque es clave para el suministro de agua potable y la producción de electricidad del país.
Los combatientes del EI ya tomaron la presa a comienzos de agosto pero unas dos semanas después los pershmerga recuperaron su control.(DPA)