Kiev se llena de tanques rusos para celebrar el Día de la Independencia de Ucrania

La ciudad de Kiev celebró hoy el trigésimo segundo aniversario de la declaración de independencia de Ucrania con una nueva exposición masiva al aire libre de tanques rusos capturados y dañados durante la guerra iniciada por Moscú el año pasado con el objetivo de volver a poner a este país en su órbita.

Durante toda la jornada, miles de ucranianos vestidos en muchos casos con camisas bordadas tradicionales y con banderas a modo de capa pasearon y se fotografiaron entre tanques, lanzacohetes móviles y otros vehículos militares con que Rusia ataca su país desde que empezó su invasión de Ucrania hace hoy un año y medio.

“POR IRPÍN”, “POR BERDIANSK”

“¡Por Berdiansk!”, exclamaba un niño natural de este puerto del mar de Azov ocupado por Rusia al encontrar en un tanque completamente quemado la inscripción, uno de los muchos mensajes de venganza que los ucranianos han escrito en rotulador en estos vehículos militares que hoy se exhiben juntos en Jreshchatik, el principal bulevar de Kiev.

En los blindados esparcidos a lo largo de la avenida, por la que antes de que la amenaza de bombardeos rusos lo impidiera desfilaba cada año en esta fecha el Ejército de Ucrania, pueden leerse infinidad de escritos como éste, “por” casi todas las localidades ucranianas ocupadas o destruidas por las fuerzas rusas.

“Por Irpín”, dice otro de los mensajes, en referencia a la ciudad satélite de Kiev ocupada al principio de la guerra por Rusia. “Por Dnéper”, reza otro, con el nombre en lengua rusa de la castigada ciudad de Dnipró, junto a una inscripción que envía a Putin al mismo infierno que debieron vivir en sus últimos momentos de vida de los tripulantes de los tanques calcinados.

Entre ‘glorias’ a Ucrania y en rotulador negro, otro escrito augura la “muerte” a “todos los ocupantes” rusos que han aceptado o han sido obligados a participar en la invasión.

UN DESFILE DISTINTO

Destruida casi por completo por el Ejército Rojo en retirada ante el avance nazi en la II Guerra Mundial, el bulevar de Jreshchatik fue reconstruido por completo en estilo neoclásico estalinista después de la victoria aliada.

La avenida más emblemática de Kiev ha vivido desde entonces decenas de desfiles soviéticos antes de que los ucranianos declararan su independencia en 1991. Muchos de los tipos de tanque que marchaban entonces han vuelto ahora al asfalto de esta arteria del centro de la ciudad, aunque dañados de forma irreparable por los misiles, cohetes y drones de la misma Ucrania que un día formó parte de la URSS.

Según las autoridades ucranianas, los primeros soldados rusos capturados llevaban uniformes de gala y otros símbolos que habrían sido utilizados para celebrar con un desfile en Kiev la victoria que muchos, incluidos los servicios secretos de Estados Unidos, habían pronosticado en apenas unos días.

Con toda probabilidad, el desfile habría tenido lugar en Jreshchatik, en el mismo sitio en el que hoy se exhibían los tanques rusos en un estado y en circunstancias muy distintas a las que había planeado el presidente ruso, Vladímir Putin.

En una de las aceras de Jreshchatik, frente al imponente edificio de arquitectura soviética que acoge el consejo municipal de Kiev, un grupo de soldados exhiben uniformes y otros efectos de soldados rusos capturados o muertos y fragmentos de misiles y drones que Rusia lanza cada día contra Ucrania.

Marcel Gascón