Así lo dijo hoy Insulza ante el Consejo Permanente de la OEA, reunido en sesión extraordinaria en su sede en Washington.
La propuesta establece un presupuesto del fondo regular de 87.9 millones de dólares para el próximo año, de los cuales 83.1 procederían de las cuotas aportadas por los países miembros.
"El momento es propicio para lograr un manejo racional de los recursos, de manera que podamos asegurar que esta valiosa institución continúe mejorando" su capacidad para desempeñar sus funciones, aseguró Insulza.
La cuantía total del presupuesto y las cuotas que aportarán los países miembros se decidirán en la próxima Asamblea General de la OEA, prevista del 5 al 7 de junio en San Salvador.
El presupuesto final para 2012 debe ser aprobado en Asamblea General extraordinaria a finales de octubre, después de que le den forma el Consejo Permanente y la Comisión Preparatoria, y partiendo de la propuesta del secretario general.
En su alocución, Insulza subrayó que los ajustes presupuestarios realizados en los últimos años se hicieron "de la manera menos traumática posible", pese a que a finales de 2011 habrá en la organización 250 puestos de trabajo dependientes del fondo regular menos que en 1995.
Durante la sesión extraordinaria, los representantes de México, República Dominicana, Estados Unidos, y Guatemala formularon propuestas sobre cómo incrementar las cuotas de los países miembros y cómo recolectar fondos externos para emprender las reformas necesarias en los edificios del organismo.