Es la primera vez que Grecia saca a subasta bonos a largo plazo desde que fue rescatada por organismos internacionales en 2010. Según el Ministerio, "la demanda fue muy fuerte" y se recaudaron unos 500 millones de euros más de lo previsto. Medios financieros apuntaron que la demanda superó los 20,000 millones de euros.
Casi el 90 por ciento de los bonos se vendieron a inversionistas internacionales, informó el gobierno. Todavía está por ver el rédito que recibirán finalmente los inversionistas, aunque, según círculos financieros, podría situarse en torno al cinco por ciento.
El primer ministro griego, Antonis Samaras, se mostró satisfecho aunque advirtió que no debe cesar la lucha contra la crisis. "El país dio otro paso decisivo para salir de la crisis (...) pocos pensaban que tendríamos éxito, y lo conseguimos", afirmó Samaras en una comparecencia televisiva en la que llamó a no cometer errores, pues todavía queda "un largo camino por delante".
"Para nosotros es como un primer paso después de una difícil operación", afirmó también el Ministerio de Finanzas, que antes de hacer oficiales las cifras aseguró que "cualquier tasa por debajo del 5.3 por ciento" sería "excelente".
El viceprimer ministro Evangelos Venizelos se mostró visiblemente satisfecho en la televisión griega: "El acontecimiento del día es el regreso festivo de Grecia a los mercados". La oferta fue superada "al menos ocho veces", afirmó el ministro sin mencionar cifras concretas.
Mucho más negativo se mostró el presidente de la alianza opositora de izquierdas Syriza, Alexis Tsipras. Al volver a pedir dinero prestado, Atenas no hace más que darse un tiro "en el pie", afirmó Tsipras, que cree que lo que el país necesita es un recorte de la deuda.
La Comisión Europea saludó por su parte la vuelta de Grecia a los mercados financieros. "Hoy es un buen día", dijo el comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, quien se reunió en Atenas con el ministro de Finanzas griego, Ioannis Stournaras.
Desde Bruselas, Siim Kallas, vicepresidenta de la Comisión, reclamó más reformas a Grecia. Para garantizar una vuelta duradera a los mercados, Atenas tiene que cumplir con los objetivos de déficit estipulados e implementar reformas impulsoras del crecimiento,señaló.
Para la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, el éxito de la subasta de bonos indica "que Grecia va en la dirección correcta". La elevada demanda de deuda griega muestra "que la prueba de fuego que querían hacer las autoridades (griegas) tuvo éxito", dijo Lagarde al inicio de la reunión de primavera del FMI y el Banco Mundial. Sin embargo, Atenas aún tiene mucho trabajo ante sí para lograr la recuperación de su economía.
Durante la peor fase de la crisis de deuda, por los bonos griegos a diez años llegó a pagarse un interés de más del 30 por ciento. Aun así, el actual cinco por ciento es superior a los intereses que paga Atenas por los créditos de organismos internacionales que recibe en el marco de su rescate.
Grecia emitió los actuales bonos del Tesoro a cinco años de acuerdo con el derecho británico, con lo que quiere dar una fuerte señal para disipar las dudas de los inversores privados ante el temor de que pueda volver a darse una suspensión de pagos.
Hace tan sólo dos años, los tenedores de bonos griegos sufrieron una importante quita, en la que los títulos perdieron de media hasta un 70 por ciento de su valor nominal. Se vieron afectados los bonos que estaban emitidos según el derecho griego, pero se salvaron los que se acogían al derecho británico o suizo.
En abril de 2010 Grecia intentó recaudar 1,000 millones de euros a 20 años, pero la demanda no superó los 390 millones de euros. Pocos días después, Atenas tuvo que recurrir a la ayuda internacional de la troika compuesta por el Banco Central Europeo (BCE), el FMI y la Comisión Europea.
Ahora, pasado lo peor de la crisis crediticia, el gobierno de Atenas quiere probar si el país puede volver a financiarse sin problemas en los mercados.
Para el diario sensacionalista Ethnos se trata del "gran paso" que sacará a Grecia de la vigilancia de su troika de acreedores. Sin embargo, el periódico de izquierdas Avgi, cercano a Syriza, profetiza "nuevos duros recortes" para los griegos. "Espectacular vuelta a los mercados", tituló por su parte el conservador "Kathimerini".
La subasta de deuda coincidió hoy con nuevos datos de desempleo en Grecia, que muestran que la tasa de paro se situó en un 26.7 por ciento en enero, sólo algo por debajo del 27.2 por ciento registrado en diciembre de 2013. Aun así, la coalición gubernamental considera que la vuelta a los mercados es una clara muestra de que el país está saliendo de la profunda crisis financiera.
La vuelta de Grecia a los mercados se produjo un día antes de la visita al país de la canciller alemana, Angela Merkel, con motivo de la cual convocaron protestas Syriza y grupos de izquierda radical, aunque la policía las prohibió en el barrio gubernamental.
Hoy, poco antes de que se difundiera el éxito de la subasta, un coche bomba explotó en Atenas sin causar víctimas pero sí graves daños materiales en las fachadas de edificios aledaños. Aún no se sabe a quién iba dirigido el atentado. En los alrededores del lugar de la explosión hay varios bancos pequeños, oficinas de juristas y periodistas y de la representación permanente del FMI. A una manzana de distancia se encuentran las oficinas del banco central griego. La policía sospecha que el atentado fue obra de una de las numerosas organizaciones clandestinas de izquierda que existen en Grecia. (DPA)