En una declaración conjunta, los ministros de Exteriores Jean-Yves Le Drian y Serguei Lavrov, y el secretario de Estado Mike Pompeo, afirmaron que los ataques recientes contra instalaciones civiles fuera de la zona de conflicto entre Armenia y Azerbaiyán, "constituyen una amenaza inaceptable" para la estabilidad de la región.
En su calidad de copresidentes del Grupo de Minsk de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), los tres ministros calificaron de "inédita y peligrosa" esta escalada de la violencia, que condenaron "con la mayor firmeza".
Los países copresidentes "están decididos" a cumplir el mandato de la OSCE y de la comunidad internacional, por lo que llaman a las partes a "comprometerse desde ahora" en reanudar el proceso para buscar una solución al conflicto, añade la declaración conjunta.
Armenia y Azarbaiyán mantienen duros enfrentamientos desde el 27 de septiembre en torno al territorio de Nagorno Karabaj, y que llegaron después de un choque fronterizo pocos días antes.