Se trata de un paso más en las pesquisas en torno a Trump y su organización por presunto fraude fiscal, de seguros y otros delitos de alcance penal, que podrían incluir tasaciones infladas, desgravaciones sin justificación y contabilidad duplicada para, a la postre, no pagar o pagar muy pocos impuestos durante años.
El fiscal del distrito de Manhattan, Cyrus Vance, tuvo acceso, entre otras cosas, a 8 años de declaraciones de impuestos y otros documentos del historial fiscal del expresidente, después de que el Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazara sus pretensiones para mantenerlos en secreto.
Los nuevos documentos obtenidos este jueves estaban en poder de Jennifer Weisselberg, exesposa de un hijo de Allen H. Weisselberg, el jefe financiero de la Organización Trump.
Según informa este viernes The New York Times, en las últimas semanas los fiscales se han centrado en Weisselberg para analizar si Trump y su empresa manipularon el valor de propiedades con el fin de obtener préstamos más favorables y beneficios fiscales.
Entre otras cosas, han solicitado acceso al historial bancario del ejecutivo y cuestionado a varias personas sobre regalos que él y su familia recibieron de Trump.
Un portavoz confirmó al diario que Jennifer Weisselberg está cooperando con los fiscales, que este jueves se llevaron de su domicilio, en el Upper West Side de Nueva York, varias cajas llenas de documentos y un computador portátil.
En el marco de las pesquisas, se sabe que la Fiscalía de Manhattan ha entrevistado, entre otros, a empleados de Deutsche Bank y la aseguradora Aon para determinar detalles sobre 300 millones de dólares en préstamos y otros pagos.
La extensa y compleja investigación incluye peticiones de información a Ladder Capital, que concedió 100 millones en préstamos a la Trump Organization, y examina posibles pagos indebidos a Ivanka Trump, hija del expresidente, como consultora externa, pese a ser parte de la Trump Organization.
La del fiscal Vance es probablemente la investigación más extensa y el mayor motivo de preocupación legal para Trump, que tiene abiertos otros casos, como una investigación civil de la fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, sobre la posibilidad de que la Trump Organization inflara el valor de propiedades que luego devaluaba cuando eso le beneficiaba fiscalmente.