“Quiero pedir perdón por esta manipulación, por un inmenso papelón (ridículo) internacional”, dijo Fernández de Kirchner a las 4:00 horas (7:00 GMT) de este lunes frente a miles de simpatizantes en el estadio Arsenal de Sarandí ubicado en la provincia de Buenos Aires.
“Espero que mañana, por la imagen del país, alguien del gobierno explique qué pasó porque no nos merecíamos algo así”, dijo después de que se revirtieran los resultados que, horas antes, habían sido festejados por el oficialismo.
La víspera se realizaron en Argentina elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en las que unos 25 millones de argentinos eligieron a los candidatos a diputados y senadores que competirán en las elecciones del próximo 22 de octubre.
La expresidenta, quien es la líder opositora más importante a Macri, se postuló como candidata a senadora en representación de la provincia de Buenos Aires, el distrito electoral más importante del país.
Como Fernández de Kirchner era la candidata única de la alianza Unidad Ciudadana, la duda más importante de la jornada era si confirmaría el triunfo que le vaticinaban las encuestas frente a su principal rival, el oficialista Esteban Bullrich, también candidato único del frente Cambiemos.
A las diez de la noche, Macri encabezó los festejos de Cambiemos acompañado de Bullrich y de la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, que presumieron un triunfo que, seis horas más tarde, resultó que no era tal.
Cuando Cambiemos celebró, Bullrich le llevaba una ventaja de siete puntos a Fernández de Kirchner, pero pasadas las tres de la mañana, ambos tenían 34.1 por ciento de los votos, en un inédito e inverosímil empate, con 95 por ciento de las mesas escrutadas.
Fernández de Kirchner anunció su triunfo y se preguntó cómo van a ver los inversionistas a Argentina como un país seguro con este tipo de situación, ya que, advirtió, el “papelón” se repitió en la provincia de Santa Fe, el tercer distrito electoral del país, en donde Cambiemos también anunció una victoria que también se estaba revirtiendo.
“¿Ustedes se imaginan si esto o algo parecido sucedía teniendo nosotros la responsabilidad de gestionar, garantizar, fiscalizar y organzar una elección?”, cuestionó.
La expresidenta explicó que su plan original era salir a hablar entre las diez y once de la noche para agradecerles a los resultados su participación en las elecciones y a los fiscales y funcionarios de mesa su trabajo cívico.
“Nunca pensé que iba a tener que pedirles perdón a todos los argentinos por este bochorno que hoy hemos vivido en nuestro país”, lamentó al considerar que el gobierno montó un show para salir en horario central de la televisión y simular un triunfo.