El ahora rey emérito llegó a querer divorciarse de la reina Sofía para casarse con esta empresaria alemana con quien fraguó una relación que contribuyó a hundir su imagen, según recoge en el libro "Final de partida" (La esfera de los libros, 2015) la periodista española Ana Romero, ex corresponsal real del diario "El Mundo".
La autora de esta "crónica" sobre los últimos cuatro años de Juan Carlos en el trono asegura en sus páginas que éste llegó a discutir con su "entrañable amiga" la posibilidad de que "ella obtuviera el título de su alteza real Corinna de Borbón".
"Juan Carlos preguntó en muchas ocasiones por qué él no podía casarse con esta persona si la infanta Elena se divorciaba, si el príncipe Felipe se casaba con una periodista divorciada. Preguntaba por qué él tenía otras reglas", desveló Romero hoy en Madrid durante la presentación de su libro.
El "complicado plan" del entonces monarca implicaba aguantar en el trono hasta la celebración del 40 aniversario de su proclamación como rey para luego "retirarse" con Corinna "en un país extranjero", explica el libro. Algo que nunca ocurrió. El 2 de junio de 2014, 17 meses antes de cumplirse esos 40 años, Juan Carlos anunció su abdicación.
"La relación entre Juan Carlos I y Corinna fue una relación de pareja pura y dura. Llegó un momento en que ella quiso que fuera diferente y empujó hacia ello, pero no se produjo", explicó hoy Romero.
Esa "doble vida", con una esposa con quien apenas hablaba y con una relación conocida solo en su círculo más íntimo, fue una de las razones que precipitaron su abdicación, según la periodista.
En apenas unos años, la imagen de Juan Carlos como "hacedor" de la democracia española fue sustituida por la de un jefe de Estado que anteponía sus intereses personales a los del país y que acudía a cacerías en Botsuana cuando España se encontraba al borde del rescate.
La publicación en 2012 de una foto del ex monarca al lado de un elefante fue "la espita" por la que salieron todos los "males" que le golpeaban, hasta el punto de que tuvo que pedir perdón a los españoles en su ya histórica frase: "Lo siento mucho. Me he equivocado y no volverá a ocurrir".
"Lo que determinó la abdicación fue la convicción absoluta en su entorno de que si Juan Carlos permanecía en la Corona, la institución monárquica corría un enorme peligro", sentenció Romero.
Alzado al trono por el dictador Francisco Franco, Juan Carlos se convirtió a partir de 1975 en uno de los protagonistas de la transición a la democracia en España, donde se recuerda especialmente su papel en el intento de golpe de estado de 1981.
En los años 90, cuando una España ya democrática se abría al mundo en los Juegos Olímpicos de Barcelona, se reinventó a sí mismo convirtiéndose en embajador económico del país. Años después, sus viajes con los principales empresarios españoles también desataron críticas. "No ayudó la presencia de personas no identificadas en los aviones de las fuerzas aéreas españolas, como la propia Corinna", indicó Romero.
Tampoco ayudaron los rumores que apuntaron al cobro de comisiones por parte del entonces monarca, un tema poco abordado hasta ahora en España. "He obtenido testimonios de personas cercanas a la familia real de Arabia Saudí y de Abu Dhabi que me dicen que es un secreto a voces en el ámbito internacional", dijo hoy Romero.
Juan Carlos solía decir que "los reyes no abdican, se mueren en la cama", pero los escándalos, incluido el desatado con la imputación de su yerno por corrupción, llevaron a su entorno a presionarle para que entregara la corona a su hijo Felipe.
Los españoles "dieron la espalda" al ex monarca al identificarle con la cúspide de un sistema que empezaba a derrumbarse en plena crisis económica y en el que los escándalos y la corrupción asomaban a las portadas de los diarios, según explicó Romero.
"Yo no pretendo destruir a Juan Carlos ni ensalzar su figura, solo contar los hechos y que cada uno saque sus propias conclusiones" dijo la periodista, quien descartó que su libro sea "polémico" o "escandaloso" en un país en el que durante décadas la prensa no ha abordado asuntos de la monarquía de forma natural. (DPA)