Los números rojos del comercio exterior en julio fueron, sin embargo, inferiores a los 6,586 millones de euros a los que se había llegado en mayo, precisó la Dirección General de Aduanas en un comunicado.
Las compras francesas en el exterior ascendieron en julio a 41,216 millones de euros, comparados con los 40,062 millones del mes precedente.
La diferencia entre esas cifras se explica por un incremento en los materiales de transporte en relación sobre todo con la recuperación del aprovisionamiento para las cadenas de montaje del fabricante de aviones Airbus, por los productos petrolíferos refinados, el material informático y electrónico y los automóviles.
Las exportaciones subieron mucho más moderadamente hasta 34,756 millones de euros, tras los 34,657 millones de junio.
La progresión de las ventas de bienes intermedios, material eléctrico, equipamientos industriales bebidas y equipamientos automovilísticos se vio ampliamente atenuado por el repliegue en la aeronáutica, los productos petroleros refinados y la farmacia.