Los detenidos son sospechosos de integrar una célula que planificó y ejecutó el ataque. Entre ellos se encuentra también el jefe de esa célula.
Los dos atacantes que fueron abatidos en el ataque llevaban grandes cantidades de explosivos en cinturones adheridos a su vientre, detalló Gharsalli. En caso que hubieran podido activarlos, se habrían desplomado grandes sectores del museo, añadió.
Solamente la rápida actuación de las fuerzas de seguridad impidió una catástrofe y una mayor cantidad de víctimas, dijo el ministro del Interior.
La semana pasada tres hombres armados mataron a 20 turistas y a un policía. Dos de los atacantes fueron abatidos por las fuerzas de seguridad, mientras que un tercero logró escapar, en uno de los atentados más letales en territorio tunecino. (DPA)