Los informes preliminares reportan que al menos 10 personas resultaron heridas con lesiones menores, mientras los servicios de socorro rescataron a dos adultos que habían quedado atrapadas en una ladera que se derrumbó.
Al menos siete temblores se registraron entre las 12:29 (00:29 GMT) y 15:38 horas locales (03:38 GMT), el más fuerte uno de 6.0 grados en la escala de Richter, cuyo epicentro fue ubicado a 10 kilómetros al sureste de la ciudad.
El segundo en magnitud llegó a 5.5 grados con epicentro a 10 kilómetros al este de Christchurch, localizada a 300 kilómetros al sur de la capital neozelandesa Wellington, en la costa este de la Isla Sur, en la provincia de Canterbury.
Las autoridades advirtieron a miles de residentes que deben prepararse para una noche sin electricidad ni agua y más réplicas sísmicas, reportó la edición electrónica de The New Zealand Herald.
El superintendente de la policía de Canterbury, comandante Dave Cliff, confirmó que nadie resultó muerto, tras informes de que habría personas atrapadas en edificios derrumbados, aunque diez fueron enviadas a diversos hospitales con lesiones no graves.
La policía ha evacuado el centro de la localidad, y los colegios, tiendas y otros edificios han cerrado sus puertas.
Los sismos provocaron al menos un incendio y desprendimientos de rocas e inundaciones, dañaron tendidos eléctricos e hicieron estallar tuberías y desagües.
A finales de febrero pasado, un poderoso terremoto de 6.3 grados en la escala de Richter sacudió el sur de Nueva Zelanda sobre todo la ciudad de Christchurch, la segunda mayor del país, que dejó 181 decesos.
Nueva Zelanda descansa sobre el llamado anillo de fuego del Pacífico y sobre un área de la Tierra donde la placa del Pacífico se une con la Indo-australiana. El país experimenta más de 14 mil sismos al año, pero sólo 20 son de más de 5 grados.